Bares y antros de Morelos son escenario de hechos violentos que cobraron vidas humanas, pero no sólo eso, sino que muchos de esos sitios de entretenimiento o esparcimiento hoy en día ya no existen. Se extinguieron junto con la vida nocturna. A continuación un recuento de los casos más representativos:
Plaza Marina
Se ubicaba en avenida Río Mayo 139. Fue el complejo por excelencia pues reunía lo mejor en bares y restaurantes entre los años 2014 y 2018.
El 19 de noviembre de 2017, a las 5:00 horas, cuando salía de dicha plaza acompañado por una mujer, el profesor Eduardo Reyna, de 37 años de edad, fue ultimado a tiros por un sujeto; la mujer también resultó lesionada.
Otro hecho que conmocionó a Cuernavaca fue la balacera ocurrida la madrugada del 29 de abril de 2021 y que dejó como saldo 12 personas lesionadas.
Alrededor de las 4:00 horas de ese día, sujetos armados abrieron fuego en el lugar. Una de las primeras versiones fue que el ataque se originó por una supuesta riña en el bar La Metiche, mientras amenizaba el grupo musical Fuerza del Rey, quienes tocaban narcocorridos, muy populares durante la década pasada.
Sin embargo, el entonces comisionado estatal de seguridad, Alberto Capella, descartó la versión, pues en un video captado por cámaras de seguridad se observa que el ataque vino desde afuera, cuando los tres responsables se bajaron de dos vehículos y comenzaron el tiroteo.
Meses antes, tres hombres resultaron heridos por arma blanca tras suscitarse una riña en uno de los establecimientos.
A finales de mayo y principios de junio de 2018, al menos la mitad de los propietarios de bares en Plaza Marina comenzaron a desmantelar sus establecimientos para llevárselos a otros lugares seguros.
Casa Bacacho
Este lugar quedará en la historia luego de los acontecimientos ocurridos la madrugada del 24 de mayo de 2021, cuando en un ataque armado perdieron la vida tres jóvenes que se encontraban al interior del bar.
Las víctimas fueron identificadas como Julio César, de 30 años de edad; Jorge Alonso, de 40; y Alejandro, de 28.
La principal línea de investigación apunta a que todo comenzó a raíz de una riña cuando las víctimas observaron que una mujer era agredida por un hombre, quien sacó un arma de fuego y les disparó a quemarropa privándolos de la vida. Hasta ahora el caso continúa impune y el responsable no ha sido detenido.
Apolo Xl
Muy pocos recordarán este bar, pero fue el escenario donde sujetos armados privaron de la vida a la dueña del establecimiento, la activista Ana Luisa Garduño, quien exigía justicia por el feminicidio de su hija Ana Karen.
Los hechos se registraron la noche del jueves 28 de enero de 2021 en el bar ubicado en la calle Álvaro Obregón, de la colonia Centro, en el municipio de Temixco.
El lugar no fue clausurado, pero cerró sus puertas de manera definitiva.
Cosmos
Este negocio fue blanco de un ataque a uno de sus trabajadores identificado como Gerardo Tulio, de 40 años, asesinado la madrugada del 10 de octubre de 2021. Asimismo, un hombre identificado como Irán, de 39 años, fue herido a la altura de la cadera por una bala perdida. Este bar es de los pocos que aún opera.
Calypso
Ubicado en avenida Río Mayo de Cuernavaca, la madrugada del sábado 31 de julio del 2021 este sitio se tiñó de sangre cuando sujetos armados agredieron a tiros a Adrián Julián, de 34 años, y Marco Antonio, de 39, propietario y gerente del lugar respectivamente.
En el lugar perdió la vida Marco Antonio, mientras que Julián fue trasladado a un hospital donde al día siguiente falleció.
La Carrillera
Ubicado en el Centro de Cuernavaca, este lugar ha sido sede de diferentes polémicas. La más reciente ocurrió la madrugada del domingo 30 de abril, cuando se reportó la muerte de un joven que presuntamente se habría arrojado desde el segundo piso.
Además, en enero de este año un grupo de jóvenes denunció haber sufrido agresiones físicas y verbales por parte del personal de seguridad y meseros. En noviembre de 2022 tres sujetos que viajaban a bordo de una moto dispararon contra la fachada del lugar e hirieron a dos, a uno de un balazo en una pierna. Tras el último acontecimiento, personal del Ayuntamiento de Cuernavaca clausuró el lugar.
Zona oriente
En el caso de la región oriente de Morelos, los hechos de violencia también han dejado estragos y marcado la vida nocturna en esa parte de la entidad.
Al menos un 90 por ciento de los establecimientos donde han ocurrido hechos sangrientos cerraron sus puertas de manera definitiva. Durante 2022 se contabilizaron 10 ataques armados contra bares, incluso incendios, relacionados con casos de extorsión.
En ese año un hombre fue asesinado a las afueras del Monkeys, en avenida Insurgentes, donde en abril de 2021 ya se había registrado otro homicidio. En julio ocurrieron dos hechos violentos sobre la carretera federal México-Cuautla. El primero en el Nenas Mens Club, y el segundo en El Encanto.
Durante los últimos meses de ese año incrementaron este tipo de ataques. El 6 de octubre, vecinos de las colonias Casasano y Año de Juárez alertaron sobre más de 30 detonaciones de arma de fuego en el bar Chacalones, que cerró sus puertas y meses después volvió abrir con nueva administración, pero tras otro ataque armado volvió a suspender el servicio.
En tanto, el 8 de octubre se reportó que una mujer murió luego de que fuera atacada a balazos en el interior de un bar ubicado en avenida Insurgentes en la colonia Emiliano Zapata de Cuautla.
Cierre de bares, en aumento
El primero de estos hechos ocurrió el domingo 15 de enero en un bar del boulevard Morelos, colonia Emiliano Zapata de Cuautla. Dos hombres y una mujer ingresaron para cometer un asalto y en el acto murió un joven tras resistirse. El bar determinó su cierre definitivo.
El segundo caso fue un ataque armado al Frutichelas, en avenida Insurgentes. El saldo fue de dos personas heridas y también cerró. Tras estos hechos, a finales de febrero diversos empresarios anunciaron que al menos cinco bares y centros nocturnos de Cuautla habían determinado su cierre debido a la ola de violencia que se vive en la localidad, al referir que en los últimos meses se ha agravado la situación de cobro de piso y extorsión.
Detallaron que ante el temor y la falta de acciones de las autoridades estos delitos no se denuncian, por lo que pidieron el anonimato por temor a sufrir represalias.
Con información de Ofelia Espinoza
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