El uuso de velas y valedoras en las ofrendas y altares en honor a quienes se han adelantado en el camino, representa una de las principales causas de incendio en estas fechas, reconoció el director de Protección Civil y Bomberos, Rubén Chávez Blanco, quien exhortó a los ciudadanos extremar precauciones.
De acuerdo con el calendario, desde el 28 de octubre se empiezan a colocar las ofrendas o alterares, dedicados primeramente a las personas que fallecieron en algún accidente o fueron asesinados; el día 30 llegan las almas de los niños que murieron y que no fueron bautizados, llamados LIMBOS; el primero de noviembre es dedicado a celebrar y recibir las almas de los niños o "angelitos" fallecidos y el día dos es dedicado a las almas de los muertos adultos o grandes.
El altar de muertos es un elemento fundamental en el conjunto de tradiciones mexicanas del Día de muertos, que consiste en instalar altares domésticos en honor de los muertos de la familia; es una mezcla cultural donde los europeos pusieron algunas flores, ceras, velas y veladoras y los indígenas le agregaron el sahumerio con su copal, comida y la flor de cempasúchil.
El significado de las velas es que su luz representa la esperanza y fe, siendo como una guía para que los difuntos puedan llegar a sus antiguos lugares; asimismo, en algunos lugares, cada vela representa a un difunto.
De ello que cada ofrenda cuente con este tipo de elemento, pero sin su adecuado manejo puede ocasionar accidentes graves.
Cada año se registran accidentes, como incendios en los hogares, debido a que no se toman las medidas de seguridad necesarias al utilizar las velas y veladoras en las ofrendas, repercutiendo en daños físicos y materiales en las personas.
Chávez Blanco recomendó que las velas y/o veladoras sean colocadas en muebles seguros o base de cemento fuera del alcance de los niños y de las mascotas, ya que por curiosidad o por accidente podrían jalarlas o manipularlas, y hacer que caigan incendiando la habitación en donde se encuentran.
Por la noche o cuando se salga de la casa es importante apagarlas, aun cuando la tradición diga que deben de estar prendidas día y noche; es recomendable también vigilar de forma constante las parafinas hasta que se consuman, además de que se debe de evitar en lo posible colocar las velas sobre papel picado y las ofrendas o altares cerca de cortinas, estufas, o en sitios en los que se almacenen materiales flamables como gasolina, alcohol, acetona, thinner o gas, de esa manera se podrá prevenir todo tipo de accidentes que puedan traer consecuencias fatales.