El conductor y un pasajero de una camioneta Chevrolet Tahoe color gris, con placas de circulación del Estado de México, resultaron heridos al quedar prensados entre los fierros de su vehículo, tras chocar contra la parte trasera de un tractocamión Kenworth color blanco con semirremolque, placas del servicio público federal.
El accidente se reportó alrededor de las 11:00 horas de la mañana de este viernes 13 de octubre, en el en el carril de baja velocidad de la autopista México-Cuernavaca a la altura del kilometro 66, en el tramo conocido como “la curva de La Pera”, con dirección al sur.
Por el impacto, los dos pasajeros de la camioneta quedaron atrapados en los restos de la camioneta por lo que tuvieron que ser rescatados por paramédicos de los servicios de emergencia y posteriormente fueron trasladarlos a un hospital de Cuernavaca.
La Policía Federal, destacó que inició que se presume que el accidente ocurrió a consecuencia de la alta velocidad con que era conducida la camioneta, por lo que se habría impactado en la parte trasera del tracto camión cuando este transitaba por su carril derecho a menor velocidad.
Sin embargo se destacó que habrán de ser los peritajes del caso los que determinen la responsabilidad de los conductores.
Desenfrenado en la Cuernavaca-Tepoztlán
Un camión materialista cargado de block se quedó sin frenos cuando circulaba por la carretera Cuernavaca-Tepoztlán, en el kilómetro 13 a la altura del poblado de San Andrés de la Cal, por lo que su conductor y ayudante resultaron con lesiones leves.
El chofer de dicho camión al darse cuenta que los frenos no funcionaban, orillo y recargo sobre el talud de su lado derecho el camión, con lo que evitó un accidente de mayores consecuencias.
Se logró saber que el material de construcción que transportaba el camionero tenía como destino una obra en construcción del poblado de Ocotepec en la capital del estado, por lo que tras el accidente, personal de la misma casa de materiales en otro camión llegó a recuperar el block que no resultó dañado para llevarlo al cliente que lo esperaba, luego de que por fortuna no hubo víctimas que lamentar