El delito de corrupción de menores creció en Morelos hasta un 17% durante el 2023 en comparación con el año anterior, uno de los delitos considerados como de mayor gravedad por quienes son las víctimas. Así lo revelaron las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
El organismo federal expuso en su informe que de enero a noviembre de 2023 se denunciaron 45 casos de este delito que involucra a niños, niñas y adolescentes, mientras que en 2022 se registraron 35 casos durante los doce meses.
Gloria Estefany Beltrán Reyes, integrante del área de Prevención del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública Morelos, indicó que este tipo de delitos atenta contra los valores y daña de gran manera el tejido social.
“La corrupción de menores en primer lugar tenemos que hablar que es un delito grave, es un delito federal y se le considera grave porque atenta contra los valores establecidos y evidentemente esto tiene un daño significativo del tejido social”, expresó Beltrán Reyes.
➡️ ¿Ya recibes las noticias en WhatsApp? ¡ES GRATIS!
De este delito existe diferentes modalidades, en las cuales se puede incurrir, tales como:
- Inducir al consumo habitual de bebidas alcohólicas, narcóticos o inducción a la farmacodependencia
- Inducción a cometer algún delito, incluyendo los que tienen que ver con actos de índole sexual como lo puede ser el comercializar el contenido, es decir, pornografía infantil
- Mendicidad forzosa
“Cuando estamos hablando de corrupción de menores, estamos hablando de una práctica en dónde un menor está siendo obligado, incitado, forzado o incluso manipulado o engañado a realizar algún tipo de actividad que no va de acuerdo con su edad, como, por ejemplo, la inducción al alcohol, a bandas delictivas, negocios en dónde haya un contexto de drogadicción”.
Gloria explicó que, al estar prohibido el trabajo infantil y adolescente, tanto los establecimientos como los padres o tutores, en caso de que lo sepan, tendrán que comparecer ante la justicia y recibir las sanciones correspondientes.
“Hoy tiene también un castigo penal para los padres de familia que den el consentimiento a sabiendas de esta situación”, indicó Beltrán Reyes.
En este sentido, mencionó que en muchos de los casos los menores no son obligados, sin embargo, existe una manipulación detrás.
“Cuando estamos hablando de un menor de edad, estamos hablando que el delito en particular es que se están adelantando procesos sexuales, psicológicos e incluso físicos que altera su desarrollo, entonces a pesar de que el niño o adolescente esté de manera voluntaria, es responsabilidad del padre de familia el sano desarrollo”.
Por último, Gloria señaló que es necesario denunciar este delito ante la autoridad correspondiente, pues en muchas ocasiones se ha identificado que no se presenta el requerimiento para que se investigue.
“Definitivamente el llamado a la denuncia, porque es fundamental en caso de que identifiquemos si algún menor está siendo víctima de este delito”, finalizó.
Únete a nuestro canal de YouTube