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Familiares, amigos y colonos del fraccionamiento Burgos de Temixco nuevamente marcharon para exigir que no quede impune el asesinato de Pablo Hidalgo.
Por segunda ocasión en la semana, con flores y veladoras caminaron y exigieron que no sea otro crimen sin resolver.
El pasado fin de semana, el joven fue asesinado afuera de una tienda de conveniencia que se ubica a la entrada al fraccionamiento durante un intento de asalto.
Este sábado 10 de julio, Santiago Hidalgo, padre del joven, reconoció que el hecho ha trascendido a nivel nacional, y espera que la muerte de su hijo no haya sido inútil, sino que exhiba la inseguridad en que vive la población en la entidad.
Aseguró que no es el único hecho violento que ha ocurrido en la zona, y agregó que justo en el sepelio de su hijo, un vecino del fraccionamiento se acercó y lo acompañó, puesto que a su padre también lo habían matado en el mismo lugar; además, otro vecino fue despojado de su camioneta a mano armada.
Consideró que la zona es insegura, por lo que se exigió más vigilancia.
Pablo era un joven estudiante de aviación, y tras su muerte, su familia tomó la determinación de donar sus órganos, y dar una oportunidad de vida. En total se benefició a 106 personas.
El procedimiento de donación de órganos se llevó a cabo en el Hospital Regional del IMSS Morelos, siendo la primera procuración multiorgánica en este año que se hace.
Los participantes dejaron flores rojas y blancas, así como veladoras y una pequeña cruz a las afueras del minisúper dónde ocurrió el crimen, para concluir con un minuto de aplausos.
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