Rodolfo “N”, de 30 años, y taxista de oficio, fue aprehendido nuevamente y puesto en prisión por agentes de la Policía de Investigación Criminal (PIC), en cumplimiento de una orden judicial, ya que tras provocar un accidente en el que murieron sus dos pasajeros y pese a que el Juez le permitió enfrentar su proceso en libertad, incumplió las medidas cautelares que le fueron impuestas.
Los hechos delictivos que se imputan al trabajador del volante se registraron el 27 de abril de 2006, cuando conducía un taxi a alta velocidad por el Boulevard Cuauhnáhuac; al llegar por la colonia Flores Magón de Cuernavaca se impactó contra un microbús de la línea Autobuses Unidos OMSA, lo que provocó la muerte de sus dos pasajeros.
Por estos hechos, Rodolfo “N” fue detenido y judicializado, pero el trabajador del volante obtuvo el beneficio de la medida cautelar diferente a la prisión, por lo que estaba obligado a garantizar una caución y firmar semanalmente ante el órgano jurisdiccional.
Sin embargo, Rodolfo “N” incumplió con sus obligaciones, por lo que fue declarado sustraído de la acción de la justicia, y el juez penal de Primera Instancia del Primer Distrito Judicial en Estado de Morelos emitió la respectiva orden de reaprehensión.
El mandato judicial fue cumplimentado por los agentes de Investigación Criminal, en la calle Poder Legislativo de la Colonia Lomas de la Selva de Cuernavaca; de inmediato, el taxista fue ingresado al Penal de Atlacholoaya en Xochitepec, para que se determine su situación ante la ley ante su incumplimiento.