"Una mujer cuando se empodera, es cuando ayuda a otra", dijo Alma Rosa Saldaña Beltrán, capacitadora de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos (CDHM) desde hace 14 años, quien se define como alguien que primero que nada, busca ser feliz, y eso lo logra en parte gracias a su trabajo.
"Me encanta el trabajo de la defensa de los derechos humanos, el reconocimiento de que todos tenemos esa dignidad y que tenemos que trabajar en ese sentido, siendo lo más importante el empoderamiento para poder alcanzar ese reconocimiento de que somos seres humanos, únicos".
A lo largo de la historia, han existido muchas mujeres que han luchado por conseguir un espacio destacado en un mundo que parecía estar dominado por los hombres. Hoy en día, hay mujeres que han sobresalido en diferentes ámbitos, en la cultura, la política, el deporte y demás, pero también hay otras que aunque no son muy conocidas pese a que han logrado sobresalir en su área, mujeres que a decir de ellas mismas, están haciendo simplemente lo que más les gusta: ayudar a los demás.
Alma Rosa tiene 14 años trabajando en la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos, está adscrita a la Unidad de Capacitación y Divulgación, y a largo de estos años su función ha sido llevar a cabo cursos, talleres, diplomados y más, abordando temas fundamentales en la defensa de los derechos humanos.
Hoy en día, se ha convertido en una de las mujeres más importantes en la defensa de los derechos humanos, siendo a través de las capacitaciones en temas relacionados a la cultura de la paz, derechos y deberes, abuso sexual infantil, prevención de la violencia, maltrato infantil, abuso de autoridad, entre otros, a niños, adolescentes y adultos, tanto estudiantes como políticos, funcionarios públicos y sociedad en general.
Sin embargo, su trabajo no ha sido nada fácil, puesto que las cifras, es lo que más le duele, "de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en México, el maltrato infantil y abuso sexual infantil están en los primeros lugares, y esos dos temas en específico me duelen mucho, porque tenemos una sociedad en donde los derechos humanos deberían de ser una parte fundamental ya que la violencia, en muchos de los casos, se genera en la familia. Una persona que maltrata a un niño, a un adolescente o adulto mayor, es cobarde".
En los años que lleva trabajando, Saldaña Beltrán ha descubierto que la única metodología para poder cambiar este panorama es a través de una metodología para los derechos humanos.
"Encontré en los derechos humanos, una puerta donde realmente se puede defender y respetar lo más importante que es la dignidad, la cual no te la da el Estado, ni nada, sino simplemente la vida".
No hay municipio en la región oriente del estado de Morelos que no haya tenido participación de Alma Rosa, quien se identifica por sus ganas de enseñar y aprender, pero sobre todo por su fortaleza como mujer.
Sin embargo, reconoció que como mujer cuesta mucho trabajo la parte de la defensa de los derechos humanos, sobre todo porque se ha enfrentado a una sociedad machista, "a una sociedad en la que simplemente el que tú quieras tomar una decisión o participar en algo, se ve limitado por estas mismas construcciones sociales. El paradigma de los derechos humanos con perspectiva de género pudiera detener estas realidades, pero aún así, duele cuando no te permiten decir o hacer lo que piensas, cuando te tienes que enfrentar a una sociedad con esas construcciones patriarcales, machistas, con lenguaje sexista y demás, pero la única manera de poder enfrentar esto es con el empoderamiento; pero hay que entender a ese empoderamiento como ese reconocimiento de lo que tú eres como ser humano, porque hombres y mujeres valemos exactamente lo mismo. Tenemos la necesidad de construir una sociedad diferente, creo que nos lo merecemos".
Para Alma Rosa el ocho de marzo representa la lucha de muchas mujeres, pero, también representa las acciones, el poder ayudar a otras personas, "el grito no es lo fuerte, sino que es ese reconcomiendo de que somos valiosas".
Por ello, dijo, es importante seguir coadyuvando y trabajando, primero en el reconocimiento como seres humanos, y seguir trabajando día a día en ello, "en el reconocimiento de que somos únicas , valiosas y que podemos construir todas y todos una mejor sociedad".