KIEV. Misiles y drones rusos destruyeron una gran central eléctrica cerca de Kiev y alcanzaron instalaciones eléctricas en varias regiones de Ucrania, aumentando la presión sobre el asediado sistema energético mientras Kiev se queda sin defensas aéreas.
El ataque, más de dos años después de la invasión rusa a gran escala, destruyó por completo la central térmica de carbón de Trypilska, cerca de la capital, dijo un alto funcionario de la empresa.
“Durante la noche, Rusia disparó más de 40 misiles y 40 drones contra Ucrania”, golpeando “infraestructuras esenciales”, afirmó el presidente Volodmir Zelenski.
El presidente ruso, Vladimir Putin, dijo que Moscú se había visto obligado a lanzar los ataques en respuesta a los ataques ucranianos de las últimas semanas contra objetivos energéticos dentro de Rusia, y con el objetivo de la “desmilitarización” de Ucrania.
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En tanto, mientras Zelenski era recibido en Vilna por su homólogo lituano Gitanas Nauseda, el Parlamento ucraniano aprobó un proyecto de ley que endurece la movilización militar, en un momento en que Kiev enfrenta una escasez de soldados voluntarios.
El texto endurece las penas para quienes eludan el reclutamiento, y generó polémica cuando se eliminó a última hora una disposición que establecía la desmovilización de los efectivos que hayan cumplido 36 meses de servicio.