A tres años de declararse la Alerta de Violencia de Género (AVG) en Morelos, aún prevalece la impunidad, la corrupción, las complicidades y la negligencia, lo cual va configurando la violencia institucional, manifestó Juliana Quintanilla de la Comisión Independiente de los Derechos Humanos (CIDH), quien, además, destacó que “la violencia no se atiende y no se sanciona y por lo tanto las diferentes instancias de Gobierno siguen siendo omisas”.
El 10 de agosto se cumplieron tres años de la emisión de dicha alerta en ocho municipios de la entidad, después de que la (CIDH) en la entidad la solicitó desde hace cuatro años; sin embargo las autoridades insisten en minimizar las acciones de la alerta de género.
Aseguró que la alarma marcó que existen actos violentos contra las mujeres, los cuales no se querían reconocer, por lo que ésta sensibilizó a la sociedad más que a las autoridades. “Para nosotros hay cambios importantes con las acciones de la sociedad, pues ya sabe qué es un feminicidio, lo que permite la denuncia, además de que apunta y previene lo que significa la violencia feminicida”, comentó Quintanilla.