El coronavirus es un problema epidemiológico que genera también daños en los hogares, en donde pueden surgir cuadros severos de paranoia en personas susceptibles.
La médica Claudia Sotelo Arias, directora del Centro de Especialización de Estudios Psicológicos en la Infancia (CEEPI) explica que es normal albergar estos sentimientos, sin embargo hay que estar atentos para no permitir que salgan de control.
"El problema surge cuando las personas que no padecen el virus se comienzan a paralizar debido a un exceso de miedo, es entonces cuando pueden padecer algunos episodios de terror, el cual puede 'contagiar' a los demás familiares"
En un material para presa, el especialista añadido que la epidemia es innegable, y si bien con las medidas de precaución adecuadas las posibilidades de contagio disminuido, muchas personas podrían estar sufriendo una fobia a morir.
"Comienzan a padecer una intensa depresión o pesimismo desmedido, rabia y un sentimiento de persecución incesante".
Sotelo Arias advirtió que este tipo de conducta paranoica puede "contagiar" a los niños y generar trastornos emocionales como ansiedad, insomnio, depresión y la sensación persistente de algunos padres, seres queridos o ellos mismos, pueden perder la vida en cualquier momento.
"La obsesión puede contagiarse y en lugar de tratar de sobrellevar el aislamiento de una forma más afectiva, con actividades lúdicas, y tratar de disfrutar en la medida de lo posible, las familias pueden convertir su hogar en una trinchera donde la posibilidad de contagio se puede dar en todo momento: eso es desgasta y termina por angustiar también a los niños "
Explicado en estos momentos es hora de tomar las cosas con cautela, ya que la otra epidemia es la emocional, y ante la cual la vacuna es la tranquilidad.
Las especialistas de CEEPI ofrecen terapias psicológicas a la población vía remota. Informes en www.ceepi.mx
Consejos para conservar la tranquilidad en el hogar:
- Estar bien informado no es equivalente a las noticias o noticieros o redes sociales durante todo el día. Esto genera un clima de estrés en el hogar.
- Ocuparse en vez de preocuparse. Es indispensable crear una rutina diaria en familia que involucre desde el desarrollo de las tareas escolares de los niños, el trabajo en la casa de los adultos, la limpieza, el juego, la diversión y los momentos de privacidad.
- Leer, ver películas, programas de interés familiar y que no tenga relación con la epidemia o con temas relacionados con ella.
Siempre pensar que todo tiene solución y que al final aunque el Covid-19 es altamente contagioso, la mayoría de las personas no se enfermarán de gravedad.
TEMORES DESMEDIDOS
Las especialistas del CEEPI explican que estos temores desmedidos se presentan, particularmente en personas:
- Que por lo general guardan su agresión hacia su propia persona o que constantemente se lastiman desde el punto de vista emocional.
- Son dependientes emocionalmente, así que siempre buscan que alguien más les resuelva sus dificultades.
- Son ambivalentes, es decir, sujetos que cambian y oscilan en sus afectos, pensamiento y acciones, como por ejemplo, modificar decisiones de un momento a otro, o irse al polo opuesto.