Muchos hijos son tomados como un “botín de guerra” durante los divorcios, esto fractura la imagen que los niños tienen de ambos padres y dificulta más el ya complicado proceso de una separación para los menores.
Martha Patricia Pérez García, supervisora de educación inicial del Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos, señaló que en los más de 30 años que tiene de experiencia como docente se ha encontrado con que cerca del 90 por ciento de los casos de padres que se divorcian, estos toman a los hijos como “un botín de guerra”, estos los utilizan para tratar de retener, chantajear o manejar a la otra persona, acciones que afectan de manera importante a los menores.
“Para los niños una separación es muy complicada sobre todo si son pequeños, el que los padres hablen mal uno del otro o tomen a los niños como un objeto, fractura la imagen de los progenitores, genera problemas emocionales en los menores que a un corto o mediano plaza tendrán consecuencias, pero en su enojo los padres no ven eso. Yo recomiendo tratar de sobre llevar la separación lo más sano posible y tratar de hacer que el niño se sienta amado y seguro pese al proceso de divorcio, después cuando tenga la madurez para que lo entienda se le podrá ya explicar un poco más abiertamente la situación”.
En algunos casos de divorcios se generan los Síndromes de Alienación Parental, los cuales se caracterizan por acciones de uno de los padres para denigrar al otro progenitor, esto se logra infundiendo miedo, denigrar a la otra persona, hablar mal de la otra persona entre otro tipo de acciones.
Según la Asociación Nacional de Afectados por la SAP este síndrome es una forma de maltratado psicológico en los menores durante un divorcio, si se busca evitar problemas de autoestima en el menor, los especialistas buscan llevar un proceso de divorcio respetuoso siempre demostrando el cariño y respeto de ambos hacia el o los hijos.
Pues los hijos siempre necesitaran a mamá y a papá , no importando que estos ya no estén juntos.
En México el SAP es sancionado por las autoridades familiares mexicanas, pues este es considerado como violencia intrafamiliar.
Suscríbete a nuestro canal
