El impacto que genera cualquier evento crítico es múltiple y cimbra el estado emocional de cualquier persona.
De acuerdo con las autoridades de salud federal la amenaza a la seguridad y la normalidad de cada individuo, así como su comunidad, se expresa en situaciones de angustia, miedo, pánico e incluso terror.
Este tipo de afectaciones ocurre en el 80 por ciento de la población, por ello es vital que las familias tomen conciencia de esta situación a fin de que cuenten con las herramientas adecuadas para atenderla de manera oportuna.
Y es que las nuevas dinámicas familiares provocan que muchas personas hayan pasado el confinamiento a solas, otras con distanciamiento con sus parejas; madres y padres solteros con sus hijos o lejos de ellos; personas que cuidan a enfermos, personas de la tercera edad aisladas. Todo ello con consecuencias.
La tanatóloga Cicely Garduño advirtió que atender la salud mental sigue siendo un tabú, ya que no todas las personas reconocen lo importante que es cuidarla, y menos están dispuestas a hablar sobre lo que sucede en su interior.
Todos tenemos conflictos internos, pero este periodo de aislamiento, tener temor ante lo que puede suceder nos afecta mucho más, lo peor es que no queda en nuestro interior sino que nos afecta también de manera física, nuestros hábitos nocturnos , hábitos alimenticios , relación con nuestros familiares, por mencionar algunas
Señaló que el miedo es la repuesta natural a los desconocido por lo que en la actualidad muchas personas atraviesan de manera normal esta sensación, sin embargo si a esto se le agrega que algunas personas viven estresadas por la situación económica, estresadas por la convivencia familiar, por el poder salir, la situación se vuelve más complicada.
En la actualidad, en Morelos el diez por ciento de la población padece de depresión y/o ansiedad, y se estima que tras la crisis sanitaria, estas cifras tendrán un impacto a la alza durante los próximos meses e incluso años.
Cicely Garduño enfatiza que buscar atención con especialistas es necesario, por ello, exhortó a la población a prestar atención a su salud mental, pues de lo contrario cuando la cuarentena se levante podrían aumentar los casos de depresión y ansiedad.
Reacciones psicológicas y psicosociales ante la crisis
Antes, durante y después de una pandemia, como la de Covid-19, las personas pueden experimentar una amplia variedad de emociones. Es importante tomarlas en cuenta para solicitar apoyo y atención oportuna.
- El enojo, la irritabilidad y la indignación; son emociones que derivan de una percepción disímil del riesgo: algunas personas actuarán desmedidamente y otras negarán o minimizarán el riesgo.
- Miedos, sentimientos de abandono y vulnerabilidad.
- Necesidad de supervivencia.
- Liderazgos espontáneos (positivos o negativos).
- Aparición de conductas que pueden oscilar entre: heroicas o mezquinas; violentas o pasivas; solidarias o egoístas.
- Ansiedad, depresión, duelos, estrés agudo, crisis emocionales y de pánico
- Reacciones colectivas de agitación, descompensación de trastornos psíquicos preexistentes, trastornos somáticos de origen psíquico.
- Miedo a nuevas epidemias.
- Incremento en el consumo y/o abuso de tabaco, alcohol y otras sustancias psicoactivas.
- Incremento en los casos, la frecuencia y la gravedad de la violencia intrafamiliar hacia grupos vulnerables, especialmente mujeres, niños, niñas y adolescentes, personas de la tercera edad y/o individuos con alguna discapacidad.
Fuente: Secretaría de Salud