El hecho de que todavía no haya sido inaugurado formalmente, no ha impedido a las familias cuautlenses y de los municipios aledaños volver a hacer suya la plaza José María Morelos y Pavón, zócalo de Cuautla, cuya explanada, jardineras y quiosco fueron reconstruidos con recursos federales.
La nueva imagen del zócalo ha dejado satisfecha a la comunidad, pero hay una solicitud muy clara: no permitir que los vendedores ambulantes vuelvan a invadirlo.
"La remodelación está bien, se ve bonito, pero si dejan que los ambulantes regresen no va a haber ninguna diferencia a como estaba antes", dice Ángel Benítez, habitante de la colonia Iztaccíhuatl, tras salir de misa y tomarse unas fotos junto a su familia en el quiosco.
Desde su apertura al público, el espacio que se ha ganado el interés de propios y ajenos es el quiosco, una nueva estructura de corte colonial bajo cuyo techo posan las familias que llegan a tomarse fotografías, con la parroquia de Santiago Apóstol como fondo.
De acuerdo con el presidente municipal, Rodrigo Arredondo López, la inauguración del zócalo (cuya rehabilitación requirió una inversión superior a los 40 millones de pesos), se llevará a cabo durante los primeros días de enero, pero no será el último paso de un proceso que busca hacer honor al carácter histórico del centro de Cuautla, ya que el ayuntamiento iniciará con los trabajos de reacondicionamiento de las fachadas de casas y negocios del primer cuadro, con la autorización del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Según el alcalde, estos trabajos se realizarán con recursos propios del ayuntamiento y el proceso será largo, ya que se tiene que intervenir fachada por fachada, quitando toldos viejos y otras estructuras no acordes a un centro histórico.
"Ojalá que vuelvan a hacerle honor a toda la historia de Cuautla", opinó Ángel Benítez.
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