Familiares de pacientes del Hospital General de Cuautla denuncian la negación del acceso a la sala de espera y albergue oficial, inaugurada en agosto por el gobernador del estado, Cuauhtémoc Blanco y el secretario de salud en Morelos, Marco Antonio Cantú.
Pese a contar con estas instalaciones, se alega que el personal y seguridad del hospital no permiten su uso.
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Como resultado, muchos familiares se encuentran en condiciones precarias en las afueras del hospital.
Sin acceso a la sala o los sanitarios, se ven obligados a pasar los días en carpas improvisadas construidas con cartón y costales. Esta situación lleva a que dependan de la solidaridad de ciudadanos para protegerse de la intemperie.
Un joven, conmovido por su situación, proporciona colchonetas, lonas y ha fumigado el área para proteger a los familiares de mosquitos transmisores de enfermedades como el dengue, zika y chikungunya.
“Nos han negado el acceso a la sala, por lo que nos encontramos en la banqueta. Gracias a un joven, contamos con un espacio para protegernos del sol y la lluvia”, explicó un familiar, cuya identidad pidió no revelar por temor a que haya represalias en la atención.
Además, los quejosos mencionaron que para hacer uso de baños, deben buscar alternativas cercanas y pagar por el servicio.
Los afectados consideran este trato como inhumano, especialmente considerando que algunos pasan semanas en espera de noticias de sus seres queridos hospitalizados.
Exigen que las autoridades estatales intervengan, garantizando el acceso a las instalaciones que, según se anunció oficialmente, existen para su beneficio.
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