Hace más de 12 meses, Mario de la Luz y su novia Brisa Amar tomaron la decisión de adoptar a un perro, por lo que se dieron a la tarea de buscar uno en los asilos de Cuernavaca; sin embargo, uno de sus amigos les contó que a través de Facebook una persona solicitaba adoptantes para un canino que fue atropellado y abandonado en la carretera que va de la capital a Tepoztlán. Inmediatamente se pusieron en contacto con esa persona llamada Estefanía López, rescatista de animales, quien les detalló los requerimientos para la adopción, que se realizó en menos de una semana.
Mylo, así bautizaron a aquel cachorro que se encontró entre la vida y la muerte, pero que con el tiempo sanó sus heridas gracias a los cuidados de sus nuevos amos, aunque Mario aclara que son sus papás.
Actualmente, Mylo vive desde hace un año y tres meses con la pareja. Aunque ahora, no son sólo tres integrantes de la familia, ya que hace cinco meses sumaron a otra "perrija", como la llaman.
"A Lola la encontramos cerca de nuestra casa, nos dimos cuenta de que no la alimentaban, por lo que yo le invitaba algunas croquetas y agua. Luego, un vecino me comentó que la familia con la que vivía solamente la usaba para camadas, por lo que decidí llevármela a casa. Así que ahora ella es feliz, es como otra hija para mí, es muy cariñosa y se lleva muy bien con Mylo", comentó.
Esta pareja de jóvenes que no tiene hijos pero sí "perrijos", considera que es mucho mejor adoptar que comprar, por lo que invita a la gente a darle una oportunidad a un perro abandonado.
"Les pido a todos que no compren, que adopten, y cuando ya tenga su mascota, es importante que la esterilicen para evitar que cada vez haya más perritos en la calle. Mylo y Lola son como mis hijos, los quiero muchísimo y sobre todo los respeto", manifestó Mario.
Lila
Otro caso de éxito de adopción es el que realizó Aketzaly Ortiz. Desde hace más de un año, decidió cambiar su vida conviviendo todos los días con su perrita Lila, la cual nació de una camada que no estaba prevista, por lo que sus dueños rápidamente se pusieron a buscarles un hogar a esos perritos con gente de confianza, con personas que realmente tuvieran ganas de cuidar y amar a una mascota. Así que Aketzaly se llevó a uno de esos caninos.
"Lila es una perrita muy amorosa y chipilona, cada mañana me da los buenos días. Se acerca a mí para que la acaricie y la hable bonito. Cuando cumplió un año de edad, decidí comprar un pastel para celebrar su aniversario de vida, también le regalé unos juguetes, los cuales la hicieron feliz. Por ahora no quiero tener hijos, más bien ya tengo una y se llama Lila, y la amo con todo mi corazón", dijo.
Caín
Sin embargo, además de ser adoptados algunos perros, otros son comprados. Y este día, Erick López decidió darle un hogar a Caín, un perro pastor belga al cual obtuvo por cuatro mil pesos.
"Quería un perro pastor belga, me gusta mucho esa raza. La verdad es que decidí ahorrar el dinero para poder comprarlo. Muchos me dicen que hubiera adoptado, pero a mí me encantó ese cachorro desde lo que lo vi. Tal vez gasté un poco de dinero pero valió la pena, voy a cuidarlo mucho y a darle bastante amor", indicó.
Los amantes de los perros antes mencionados coincidieron que para ellos es más viable comprar productos para sus mascotas en comercios ambulantes, ya que son más económicos que en las tiendas de renombre. También estuvieron de acuerdo en que un perro es una responsabilidad muy grande, en la que tienes que dedicarles tiempo, para enseñarles a ir al baño en el lugar correcto y darles una educación en la que no ponga en peligro su vida, así como a tenerles un respeto, porque son seres que sienten.