Mientras organizaciones no gubernamentales solicitaron que se revise a fondo los antecedentes del capitán Federico Rivas Valdés, que acompañará al próximo titular de la Secretaria de Seguridad Pública (SSP) en Morelos, con la finalidad de generar certeza y no más incertidumbre; el coordinador de la comisión de entrega-recepción, José Manuel Sanz, aseveró que las acusaciones no están comprobadas, en caso contrario, el marino ya no seguirá en esa institución.
Susana Díaz Pineda, del Centro de Derechos Humanos "Digna Ochoa", dijo que el nombramiento que hizo el mandatario estatal, de quien será subalterno del jefe policiaco, nuevamente genera incertidumbre, sobre todo cuando surge información explicita sobre sus actividades y los vínculos que se mencionan.
Nuevamente llegan esas dudas sobre un marino que estará en la SSP, con un negro historial, por lo tanto, no creemos que sea garantía de que la seguridad regresará a Morelos con esos antecedentes, y si genera incertidumbre de que las desapariciones y las violaciones a los derechos humanos en la población civil. Por eso el llamado al gobernador Blanco a que se siente y que busque a una persona que genera resultados, sin que se militarice a la seguridad pública de Morelos
Recordó que los activistas en la entidad siempre han pugnado, porque los militares no son en realidad la solución, y es que estos nombramientos, acotó, lejos de dar certeza, abre dudas sobre si habrá respeto a los derechos humanos de la población civil en Morelos, porque hasta hoy, no existe.
Previo a su encuentro con la representación del Gobierno estatal, Sanz Rivera comentó que de las acusaciones en contra del capitán que acompaña al próximo secretario de Seguridad en el Gobierno que inicia funciones el 1 de octubre, son acusaciones que en realidad nunca fueron comprobadas, y el "capitán Rivas es un miembro activo de la marina, y no tiene ninguna inhabilitación ni nada, entonces, no hay nada que se prueba comprobar", agregó.
Incluso, comentó que hubo una declaración por parte del capitán para señalar el suceso, pero además, el equipo del mandatario electo confía en él, porque si hubiera en realidad ese antecedente sería imposible que siguiera activo dentro de una institución como la Marina.