Durante esta temporada de lluvias, varios inmuebles históricos de Cuautla, ubicados en la Zona de Monumentos Históricos, han sufrido afectaciones a causa del reblandecimiento de los materiales con los que fueron construidos, principalmente de adobe.
Desde el muro del restaurante La Pastora, que operara como fábrica de alcohol, hasta el inmueble ubicado en la calle De la Tesorería, en la contra esquina del palacio municipal.
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Se trata, mayormente, de propiedades privadas cuyos propietarios tendrían que hacerse cargo de su restauración, siempre vigilada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
El cronista Óscar Apáez Godoy, de la asociación civil Precursores de la Historia de Cuautla, reconoció las dificultades en torno a la restauración de los monumentos históricos, dados los requerimientos que exige su preservación:
Es complicado. El INAH tiene disposiciones estrictas sobre cómo deben restaurarse estos monumentos, deben usar materiales similares a los originales, y eso toma tiempo
Lluvias: Otros inmuebles dañados
Además del colapso de la barda de La Pastora, una estructura que ya existía cuando, en 1812, Félix María Calleja sitió a Morelos en la villa de aquel entonces, otras construcciones que han sufrido afectaciones durante esta temporada de lluvias son
- Una vivienda particular ubicada en la calle Matamoros, cuyo muro principal también ha sufrido desprendimientos.
- Una barda ubicada en la calle De la Tesorería.
- Un muro de una antigua vivienda que se encuentra en la calle Alcaraz, cerca de la antigua estación del ferrocarril interoceánico.