Padres de familia de la Primaria Justo Sierra de Tlayacapan tomaron las instalaciones del plantel para exigir la salida de la supervisora de la zona escolar 21, Sara Edith Pérez Barreto.
De acuerdo con los padres de familia, desde la llegada de la supervisora con un plan de trabajo nuevo, se han presentado diversos conflictos dentro de la institución que repercutieron principalmente en los alumnos.
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Por este motivo solicitaron la salida de la supervisora, ya que antes de su llegada a la escuela existía una buena comunicación entre las autoridades educativas y los padres de familia.
¿Qué generó esta demanda por parte de los padres de familia?
Uno de los conflictos que generaron esta protesta es que antes la escuela contaba con una persona contratada y pagada por los padres de familia para realizar la limpieza y supervisión del buen uso de los sanitarios, sin embargo, esta persona fue despedida por Pérez Barreto, ya que aseguró no podía entrar ninguna persona ajena a la institución.
Según los manifestantes, dicha decisión provocó que ahora ocurran incidentes dentro de los sanitarios, porque no hay una vigilancia en el acceso, además de que la limpieza ha decaído al grado de que los alumnos presentaron problemas médicos.
Asimismo acusaron que la escuela, mediante acuerdos y cooperaciones de padres de familia lograron equipar y habilitar un aula de computación y se tenía contratado a un maestro con el objetivo de que los alumnos tuvieran una educación digital y tecnológica. Situación que cambió con Pérez Barreto, ya que, con su plan de trabajo obstaculizo y canceló dichas clases.
"Nosotros como padres de familia, cada ciclo escolar llegamos al acuerdo de una aportación económica voluntaria para ayudar a solventar los gastos que se propician dentro de la institución, porque estamos conscientes de que las aportaciones que da el gobierno o las instancias educativas no son suficientes para lograr un mantenimiento óptimo de las instalaciones, pero la profesora llegó y determinó que esas aportaciones voluntarias, que nosotros en común acuerdo realizábamos, no se darían porque es incurrir en un delito".
Ante esta situación, los padres de familia manifestaron que se vive una división y se ha dejado de dar un desarrollo importante a los alumnos, por lo que exigen la remoción de la supervisora.