Construido en 1668, el ingenio de Oacalco es sinónimo de historia, cultura y una construcción social en Yautepec, luego de años de haber sido cerrado y aparentemente abandonado, el séptimo arte ha retomado la belleza de sus construcciones para destacar a la localidad a nivel mundial, para generar un antes y un después entre los yautepequenses.
Ubicado en la región Oriente de Morelos, el ingenio, a pesar de que fue construido en 1668, de acuerdo con historiadores de la entidad tiene antecedentes de trapiches más antiguos, pero sólo a partir de dicho año se encuentra documentación en el archivo general de la nacional sobre su construcción.
En su tiempo, el ingenio fue uno de los mayores productores de azúcar a nivel mundial, lo cual generó importantes riquezas, sin embargo, en 1989 cerró consecuencia de procesos de corrupción y degradación que a nivel nacional se suscitaron en diversas paraestatales del país, así como problemas con los sindicatos azucareros.
Por más de cinco años, empleados del ingenio trataron de rescatarlo a través de manifestaciones, tomas y acciones de fuerza, no obstante, cerró de manera definitiva y hasta la fecha sigue en aparente estado de abandono por los sindicatos azucareros y autoridades.
Gustavo Garibay López, historiador del estado de Morelos, explicó que al interior del ingenio existe la vieja y nueva casa, casas ostentosas de estilo neoclásico construidas por el arquitecto Tolsá y Sarrión, quien fuera un reconocido arquitecto y escultor español, quien quedó encargado como director de Escultura de la Academia de San Carlos, y construyó el Palacio de minería.
Aunque el ingenio de Oacalco no es considerado monumento histórico, pese a que se ha intentado en varias ocasiones declararlo, es un inmueble que por su historia es susceptible de protección legal, puesto que el reglamento y leyes en materia de conservación del patrimonio cultural y la ley federal de monumentos y zonas arqueológicas, artísticas e históricos "cuidan" de la construcción.
Los estragos del cine
La mañana del 17 de abril, el actor Will Smith sorprendió a los habitantes del municipio al llegar a la comunidad, donde se filmarían algunas escenas para la tercera parte de la saga Bad Boys (Dos policías rebeldes), serie de películas que inició en 1995, dirigida por Michael Bay.
Creo que el fenómeno que vimos en la comunidad de Oacalco con la visita de Will Smith nos habla de la necesidad de las comunidades de ser tomadas en cuenta en los procesos de desarrollo económico, Oacalco es desde 1989 una comunidad sumamente castigada a partir del cierre del ingenio, eso trajo una serie de procesos de desintegración, problemas de salud pública, retraso en el desarrollo de la comunidad e incluso de inmigración, opinó Garibay López.
En este sentido, reconoció la fascinación por parte de la población morelense ante figuras de gran impacto a través de la industria cultural que representa el cine, sin embargo, también señaló que esta visita podría generar un antes y un después en la comunidad, pues de trabajarse de una manera inteligente representaría un brinco para mejorar la comunidad y el estilo de vida de sus habitantes..
Refirió que las grabaciones cinematográficas podrían generar una entrada de recursos económicos a las familias, así como una multiplicidad de servicios para la zona como hospedaje, transporte, comida, ya que son algunas de las necesidades elementales de los actores y el staff; incluso podría beneficiar a municipios como Cuautla, Tlayacapán, y Cuernavaca.
Yautepec es escenario favorito del séptimo arte
Por su ambiente tropical y algunas instalaciones, Yautepec ha sido locación para muchas películas nacionales e internacionales. Durante la época del cine de oro en México, alrededor de 70 películas fueron grabadas en parte en la demarcación, al ser Oacalco, Oaxtepec y Cocoyoc las comunidades más socorridas.