En Navidad y Año Nuevo los mariachis son los más solicitados para alegrar el hogar de los mexicanos, pero desde hace 10 años Tomás decidió no trabajar en estas fechas y alegrar el corazón de su familia porque dice es una temporada única y su trabajo lo tiene todo el año.
Tomás Sánchez Martínez llegó de Guerrero hace 27 años y desde ese día se detiene a un costado del Zócalo junto a un grupo de mariachis para cantar a las familias que lo solicitan.
Su gusto por la música empezó cuando de niño escuchaba las canciones de Pedro Infante, Antonio Aguilar, Jorge Negrete y Javier Solís y, aunque en ese tiempo no tuvo la oportunidad de cantar, al cumplir 32 años viajó a la capital morelense, y desde esa fecha complace a familias en momentos importantes como aniversarios de boda y cumpleaños.
De niño no tuve la oportunidad pero en mi corazón tenía la idea de que cuando pudiera sería músico y gracias a Dios lo logré. Llevo 27 años en esta carrera y para mí es una gran satisfacción ver a la gente contenta porque mi trabajo los hace felices
Hace más de 20 años los mariachis eran más solicitados, que en la actualidad y aunque no tienen una temporada especial este oficio ha decaído por la diversidad de géneros musicales y el poco entusiasmo que pone la gente en el folclor mexicano.
Después de 17 años de cantar para otras familias desde el 2008 canta a su esposa e hijos porque, aunque puede ser una buena temporada, Tomás prefiere compartir estos momentos en familia y perder los pesos que puede ganar.
Es más importante mi familia, no digo que el trabajo no, pero me importa mucho mi familia. Pasar estos días tan importantes con ellos abrazándonos y en convivencia significa mucho para mí, así que me pregunté cómo era posible alegrar a otras personas en esas fechas y a mi familia qué…
Hasta el momento, ninguno de sus cuatro hijos mostró interés en la música y así lo prefiere Tomás porque dice que es una vida difícil por los desvelos y por no comer a sus horas para cumplir con los compromisos de la gente, por eso les dijo a sus hijos que estudien una carrera y si después les gusta la música, adelante.
El 29 de diciembre Tomás cumplirá 59 años y lo festejará trabajando porque su pasión es alegrar corazones.