Hasta ahora ignorados en la primera fase de vacunación contra el Covid-19 emprendida por las autoridades de salud del gobierno federal, los médicos particulares han reclamado el derecho de acceder a esta vía de protección debido a que en muchas ocasiones son el primer contacto que tienen los enfermos. En Hueyapan, un pueblo de usos y costumbres ubicado a las faldas del volcán Popocatépetl, esta exigencia puede verse recrudecida por la característica de una población que se niega a realizar fiestas y celebraciones.
Ricardo Montero Lara, médico particular en Hueyapan, ha visto incrementarse los casos de Covid-19 en su comunidad en las últimas semanas, sobre todo luego de las fiestas de fines de diciembre. Desde esta región del estado, el médico considera que los particulares también deben ser considerados en la primera fase de la vacunación:
“Yo les comentaba a los amigos que aquí en el pueblo somos pocos médicos los que habemos, los cuales no estamos contemplados para ser vacunados en la primera jornada de vacunación; entonces, también nos sentimos como una primera línea contra el Covid, pero el gobierno tristemente no nos está tomando en cuenta a los particulares”, relata Montero.
En las semanas recientes, el médico ha sido testigo no sólo de las celebraciones de fin de año realizadas en su comunidad, como las cenas y las posadas, sino también de bodas multitudinarias, como son las propias de localidades como Hueyapan, y jaripeos.
“Sí tenemos un aumento, pero no se refleja en las estadísticas porque muchos se hacen la prueba en laboratorios particulares, pero en estas dos semanas hemos visto fácilmente yo, hablando de mi experiencia, unos seis pacientes con Covid-19”.
Oficialmente, de acuerdo con las cifras presentadas por la Secretaría de Salud, el municipio indígena de Hueyapan ha presentado 10 casos confirmados del virus, así como dos defunciones. Recientemente, un grupo de pobladores se organizó para llevar a cabo una jornada de desinfección que fue posible gracias a las donaciones realizadas por los vecinos.