Tania Nava es una de las activistas pro derechos de la comunidad LGBT+ más influyentes en el estado de Morelos; su perseverancia y amor por Mónica Parra la motivó a ser una de las precursoras de la lucha para la aprobación del matrimonio igualitario en el estado.
En 2016, el matrimonio igualitario fue aprobado por el Congreso del Estado de Morelos, con esta “conquista”, Mony y Tania unieron sus vidas de manera legal, siendo una de las primeras parejas pertenecientes a la comunidad LGBT+ que tuvo una boda civil en Cuernavaca.
Los impedimentos para lograr la boda fueron muchos, principalmente por la discriminación, que a pesar de que por ley ya podían unir sus vidas, el contexto religioso dentro de las políticas públicas lo polarizaron, es decir, jueces y juezas se regían bajo posturas religiosas lo que ocasionó constantes negativas.
“Fue un camino muy largo para toda la población LGBT+ y con la experiencia de ser una de las primeras parejas en casarse en Morelos… La boda fue en 2016 y fue un proceso también sobre todo en los ayuntamientos que nos enfrentamos a jueces y juezas que por cuestiones religiosas nos daban la negativa de que no iban a casar a una pareja del mismo sexo y nos quedamos a que nos leyeran una epístola muy famosa que no tiene perspectiva de género y que se leía en la época de nuestros abuelos”, explicó Tania.
Señala que a partir de esa fecha (2016) sí se han dado algunos cambios, en temas muy sencillos como por ejemplo, la modificación de los formatos matrimoniales. Se pasó de tener formatos que decían “la contrayente y el contrayente”, que hacían alusión de que los matrimonios tenían que ser sólo entre hombre y mujer, y ahora se cambió a “contrayente uno y contrayente dos”, sin necesidad de una etiqueta de género.
Faltan derechos para la conformación de familias
Sin embargo, dijo que aún faltan las reformas necesarias a nivel estatal y a nivel nacional para la conformación de las familias, reconocimiento pleno a los derechos, filiaciones y adopción.
En este último rubro de adopción, señaló que se han tenido avances en parejas homoparentales pero no leboparentales. Precisó en Morelos desde el 2020 se realizaron dos adopciones entre parejas conformadas por hombres, mientras que en las parejas lesboparentales no se ha dado el caso e incluso se interpuso un amparo para la adopción.
En este último caso dijo que todavía perciben una discriminación debido a que se señala que la mujer puede concebir y por ello les niegan la adopción.
Tania señaló que, la asociación “Acciona”, que ella preside, ha recibido más de 237 solicitudes de parejas homoparentales y lesboparentales para recibir orientación y apoyo; reconoció que en el tema de matrimonio las áreas administrativa de los ayuntamientos tienen un mejor trato para el proceso matrimonial entre parejas del mismo sexo.