La venta de cruces de pericón se canceló en 2020 por la pandemia, pero esta vez regresó para que, como cada 28 de septiembre, las casas “se protejan” de la liberación del demonio.
Esta es una creencia religiosa que cada año se lleva a cabo y que en Morelos tiene una gran aceptación, aunque algunos vendedores creen que poco a poco se han reducido las tradiciones.
El precio del la cruz o el ramo está entre los cinco y 10 pesos. La mayoría de las personas que vende este producto son mujeres, algunas llevan años vendiendo desde que eran pequeñas.
Una pequeña cruz elaborada de esta flor tiene tanta fuerza y poder que es capaz de ahuyentar al diablo de nuestros hogares, carros, sembradíos o negocios, pues por décadas se le han atribuido muchos poderes de protección.
Al menos eso indica la leyenda que ha pasado de generación en generación, pues cada 29 de septiembre el diablo anda suelto en las calles, pues de acuerdo con la tradición católica, San Miguel Arcángel persiguió incansablemente a Satanás, quien fue expulsado del cielo y en su huida, el diablo recorre las calles e intentará entrar a sus hogares, y esta característica flor la que logra derrotarlo.
Por lo anterior desde días antes en las calles se puede observar a gente vendiendo estas flores ya sea en ramo o ya en forma de cruz, productos que venden en 5 o 10 pesos promedio.
La flor se da de manera natural en los campos del país durante la temporada de lluvias, siempre en las mismas fechas, previo a los últimos días del mes de septiembre.
Las personas acuden a estos lugares para cortarla, juntarla en grandes y pesados manojos y así trasladarlas a las zonas urbanas de los municipios. Después arman las cruces y los manojos.
Joaquín Roldán vive en la región oriente del estado de Morelos. Él y su familia cada año cortan flor de pericón para venderla en ramos o manojos. Señala que son las personas adultas o adultas mayores quienes en su mayoría compran la flor.
Además de protegernos del diablo esta flor tiene otros beneficios que a veces las personas desconocen, algunos de ellos son: colorante de algunos alimentos y bebidas en el país, ayuda al cocimiento, coloración y sabor de los elotes y chayotes cuando estos se hierven en agua, también sirve como té para aliviar la diarrea, cólicos, empacho, tifoidea o vómito.
Otro de los usos se los dan algunas parteras cuando una mujer da a luz para tratar problemas menstruales y sirve como diurético.
Cada 29 de septiembre el diablo anda suelto en las calles, pues según la tradición católica San Miguel Arcángel persiguió incansablemente a Satanás, quien fue expulsado del cielo y en su huida el diablo recorre las calles e intentará entrar a los hogares