Después de más de dos años de haber sido diagnosticada con leucemia linfoblástica aguda, una enfermedad que representa casi la mitad del total de niños mexicanos con cáncer, Karla Hurtado, a quien todos hemos conocido como Karlita en los medios de comunicación locales, finalmente concluyó su tratamiento de quimioterapias en el Hospital del Niño Morelense y hoy se prepara para una última prueba que también espera superar.
“El próximo jueves me tocan análisis y me da un poquito de miedo, porque si no salen bien me pueden poner más quimioterapias o hasta un trasplante, viendo la gravedad de la situación, pero espero que eso no pase”, dijo Karlita, animada, al dar a conocer la noticia del término de su tratamiento.
Durante dos años, Karlita y su familia tuvieron que hacer frente a una historia difícil que hoy cierra un capítulo: las dificultades para lograr que la niña, quien vive en la colonia Juan Morales, del municipio de Yecapixtla, recibiera las quimios en el hospital, que se encuentra en el municipio de Emiliano Zapata. Dados las dificultades que implan transportar a un niño con cáncer en un autobús (en muchas ocasiones, el viaje de vuelta se hacía imposible por los efectos secundarios del tratamiento y los conductores se negaban a darles servicio), sus padres tenían que hacer el traslado en taxi, lo que los llevó a organizar rifas y eventos para recaudar fondos. Afortunadamente, la ciudadanía los apoyó.
“Me siento muy feliz, no puedo aguantar la sonrisa, hagan de cuenta que mi cerebro le dice a mi cara que sonría… Estoy tan feliz, casi no me lo creo”, expresa la niña.
A la espera de un último estudio que le será realizado el próximo jueves, para descartar que el cáncer siga presente en su organismo, a Karlita y su familia también les espera un periodo de vigilancia que permita garantizar la eliminación de la enfermedad.
El cáncer infantil en México
De acuerdo con la Secretaría de Salud, cada año se presentan en México entre cinco y seis mil casos nuevo de cáncer en personas menores de 18 años. Del total, las leucemias representan un 50 por ciento; los linfomas un 15 por ciento y los tumores del sistema nervioso central un 10 por ciento.
La leucemia linfoblástica aguda es un desorden maligno en las células que producen la sangre, el cual afecta los glóbulos rojos y las plaquetas. Su origen se presenta en la médula ósea y es más común que se origine en la edad preescolar de los menores.