El Instituto para la Inclusión y Desarrollo de las Personas con Discapacidad del Estado de Morelos tendrá un recorte presupuestal de 1.5 millones de pesos para el próximo 2025 ante la falta de recursos económicos.
De acuerdo con el diputado local, Alberto Sánchez Ortega, el recorte en el presupuesto es injusto, “ya que a través del instituto nacerían las políticas públicas generadas de las propias vivencias de las personas con discapacidad”. Sin embargo, confía en que la persona que el Ejecutivo designe para estar al frente del Instituto cuente con el perfil y conocimiento del tema, a fin de generar mejores oportunidades de empleo, educación y deporte.
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Para el ejercicio fiscal de 2024, el gobierno que entonces encabezó Cuauhtémoc Blanco Bravo designó 2 millones y medio para su operación; sin embargo, para el próximo 2025 solo está contemplado un millón de pesos.
Sánchez Ortega destacó que hay deportistas paralímpicos que han destacado en diversas ramas deportivas, y puede esto convertirse en una forma de ganarse la vida y coadyuvar en los gastos de sus familias.
“Aunque se tenga una discapacidad, cualquiera que sea, también se aspira a formar una familia, tener un patrimonio”.
Indicó que la aspiración es que a las personas con discapacidad se les incluya en la vida laboral “que no se nos volteé a ver como culturalmente ha sido históricamente, como un estigma, como sujetos dependientes; nosotros podemos generar nuestras propias condiciones, siempre y cuando se creen las condiciones, por eso la importancia del instituto”.
Dijo que el argumento que dio la secretaría de Hacienda es que no se cuentan con los aproximadamente 40 millones de pesos para crear el instituto de acuerdo a lo que marca la Ley para la Inclusión al Desarrollo de las Personas con Discapacidad en el Estado de Morelos.
En Morelos existen más de 300 mil personas con discapacidad; el estimado de beneficiarios es de 12 mil morelenses, y con los 2.5 millones de pesos presupuestados para este año se pudieron buscar un pequeño inmueble para empezar a operar, situación que se vuelve más compleja con la reducción presupuestal.