Para quienes visitan el mercado municipal de Cuautla buscando satisfacer su paladar, las fonditas que se encuentran en el pasillo principal son una parada obligatoria. En ellas es posible encontrar los sabores más tradicionales de la cocina mexicana y local, comenzando por la cecina, el pozole y, acaso uno de los favoritos para los turistas, el huaxmole, un platillo típico cuyos orígenes se remontan a la época prehispánica.
El origen del huaxmole: Un platillo ancestral
Su nombre proviene del náhuatl: "huax" (guaje) y "molli" (mole o salsa), por lo que se traduce como "mole de guaje".
Al prepararlo, se utilizan vainas de guaje, las cuales se muelen para darle el sabor característico al caldo.
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Además, la receta incluye ingredientes como carne de cerdo o pollo, chiles secos (como el guajillo y el pasilla), jitomate, cebolla, ajo y varias hierbas aromáticas.
"Este se hace con carne de puerco, se guisa con jitomate y chile serrano. Y ya la vaina del guaje se vuelve a moler y, cuando el jitomate está hirviendo y ya sazonado, se agrega el guaje. Le ponemos cilantro, que es lo que también le da sabor", dice Eloisa Ramírez, de la fonda "La Única".
Los sabores más tradicionales en las fonditas de Cuautla
El huaxmole es un platillo que no solo se prepara en Morelos, sino también en los estados de Puebla y Oaxaca. Su origen nos lleva hasta la época prehispánica, cuando los antiguos mexicanos ya utilizaban las semillas y las vainas de guaje, una planta originaria de México, para preparar su alimento. Hoy, cada plato cuesta 65 pesos.
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"Lo que más nos piden es el huaxmole y la cecina de Yecapixtla. Mucha gente que viene de la Ciudad de México o de fuera pide estos dos platillos, que son los más tradicionales", agrega Eloisa.
La vida al interior del mercado municipal de Cuautla transcurre entre los gritos de los vendedores y el bullicio de la gente, pero aquí, en la zona de las fonditas, hay un remanso que permite disfrutar del sabor que ofrecen las cocineras.