El Instituto de Capacitación para el Trabajo del Estado de Morelos (Icatmor) busca promover la inclusión a través de diversas capacitaciones. Sin embargo, se enfrenta a un desafío significativo: la falta de instructores calificados para proporcionar estos talleres.

Miguel Octavio Sánchez Hernández, director del plantel 02 del Icatmor ubicado en Anenecuilco, señaló que los cursos más tradicionales, como manualidades, cocina, estética, electricidad, mecánica y computación, son los más demandados. No obstante, encontrar instructores para talleres de lenguas autóctonas y otras áreas inclusivas es una tarea difícil.

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"Para garantizar la calidad de nuestros capacitadores, debemos asegurar su profesionalización; es decir, que cumplan con todos los requisitos necesarios. No importa cuán buena sea la voluntad de un maestro para enseñar, no puede desempeñarse en su rol si no está debidamente preparado", explicó Sánchez Hernández.

A pesar de los desafíos, el Icatmor logró ofrecer tres talleres inclusivos: Lengua de Señas Mexicana, Braille y Náhuatl, gracias a la contratación de instructores de la región. Sin embargo, el director reconoció que aún queda mucho por hacer en términos de expansión y mejora de la oferta educativa inclusiva.

"Aún no hemos encontrado maestros para impartir más talleres de lenguas autóctonas y otras áreas que nos permitan fomentar la inclusión social, pero la idea es expandirnos en el estado", afirmó.

Actualmente, el Icatmor cuenta con ocho unidades móviles desplegadas en los municipios, con el objetivo de acercar la educación y capacitación a más personas en el estado.

Sánchez Hernández insistió en la importancia de la profesionalización de los instructores y en la estricta evaluación de sus calificaciones:

"Somos muy estrictos en este aspecto porque debemos garantizar que las capacitaciones sean impartidas por profesionales altamente capacitados", aseguró.

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