[Especial] Hay un Morelos para todos

La entidad puede conquistar ya sea con grandes hoteles o comiendo en calles rústicas 

Emmanuel Ruiz | El Sol de Cuautla

  · sábado 26 de septiembre de 2020

El Tubo Hotel, se ubica a un costado de la autopista Tepoztlán-México, cuya particularidad es que las habitaciones tienen forma de tubo / Cortesía | @tubohotel

Hay que ser muy necio para que no te guste Morelos. Es decir: hay que oponerse en un gran acto de resistencia para no dejarse convencer por sus encantos. Ya sean sus lugares, su clima tropical y sus monumentos históricos; o por su comida, que va de lo artesanal a lo exprés. Ahora que el panorama de salud parece mejorar, vale la pena recordar algunos de los sitios que merecen ser visitados, y los alimentos que es justo y necesario probar.

Hoteles que marcan la diferencia

Si un concepto en hospedaje se ha puesto de moda recientemente, es el glamping, ya definido como un fenómeno global que reúne la experiencia de acampar al aire libre con el lujo y las condiciones propias de los mejores hoteles.

En México aún hay pocos espacios de este tipo, pero uno de ellos está justamente en Morelos. Se trata de Tendo Glamping, un campamento ubicado en lo alto de Tepoztlán que ofrece no sólo hospedaje de lujo al aire libre, sino también actividades deportivas.

Para llegar al hospedaje se debe realizar un recorrido de 15 minutos a través de la montaña y, según las reseñas de quienes ya se han hospedado en dicho lugar, el destino bien vale completamente la pena.

También en Tepoztlán encontramos un hotel peculiar: el Tubo Hotel, ubicado a bordo de la autopista Tepoztlán-México, cuya particularidad es que las habitaciones tienen forma de tubo. El sitio, vistoso desde que lo ves al pasar por la carretera, ha sido visitado por youtubers que han relatado la experiencia de dormir en este espacio.

Los sabores más ricos de Morelos

México tiene sus sabores particulares: el pozole, los tacos al pastor, los chiles en nogada. Pero Morelos tiene los suyos propios. Si de disfrutar al estado a través de sus sabores se trata, no es necesario ir a restaurantes de lujo o sitios costos. Se puede desde la calle, en algún mercado o una fonda.

La cecina de Yecapixtla representa toda una tradición culinaria para los habitantes de este municipio / Archivo

La cecina de Yecapixtla

Probablemente el platillo más típico de la región Oriente, es la cecina de Yecapixtla que representa toda una tradición culinaria para los habitantes de este municipio, todavía considerado como Pueblo con historia y tradición por el gobierno estatal. El centro de Yecapixtla abunda en establecimientos y restaurantes en los que es posible degustar este platillo, hecho con el lomo y las piernas de las reces. Un secreto y un consejo: si quieres probarla gratis (y hasta terminar satisfecho), puedes darte una vuelta al mercado municipal, donde no faltarán vendedores que estiren la mano hacia ti, ofreciéndote tacos para que pruebes la cecina que venden. Claro que lo mejor es comprarle a alguno de ellos y, con ello, apoyar la economía local.

Las mojarras de Coatetelco

Dicen que si vas a Coatetelco debes ir con hambre. De otra forma será difícil poder terminarte alguna de las enormes mojarras que sirven en la laguna de este municipio indígena. Se trata de otro sabor imprescindible, acompañado por salsa macha, tortillas hechas a mano, sopes y, esto ya depende de cada quién, cerveza. O un agua bien fría.

Los tacos dorados de Jojutla

Por fuera parecen tacos dorados ordinarios, pero por dentro no lo son. Hechos con carne molida, estos tacos pueden disfrutarse en el mercado de Jojutla, donde los vendedores han aprendido a venderlos a granel, porque no hay manera de comerse uno solo, o porque su bajo costo permite no sólo comprar para uno mismo, sino también llevar para familia y los amigos.

Las mojarras frescas de la laguna de Coatetelco se acompañan con salsa macha y tortillas hechas a mano / Archivo