“La casa está muy bonita, la verdad me gusta mucho; nunca imaginé que viviría en una casa tan bien hecha, de verdad estoy muy contenta”, afirmó Paula Salazar Martínez.
A sus 89 años de edad, tiene la emoción de un niño por estrenar la vivienda que Unidos por Morelos y la fundación ¡Échale! A tu casa le ayudaron a construir, tanto, que le pidió a su hijo Baltazar que le comprara una estufa, una cama y hasta un nuevo ropero y es que, no es para más, recuperó el hogar que el sismo de septiembre le destruyó.
Paula Salazar Martínez y su hijo Baltazar Nolasco Salazar son una de las ocho familias que en Totolapan, “Unidos por Morelos” ayudó a reconstruir su vivienda y están a unos días de que la reciban de manera formal.
“Al principio yo la veía y no me gustaba mucho, estaba bajita y pensaba que se iba encerrar el calor, pero al entrar por primera vez la sentí muy fresca, me gustó mucho”, expresó doña Paula.
Su nueva casa está construida de adoblock, un material térmico con la resistencia del concreto y la apariencia del adobe; mide 48 metros cuadrados y cuenta con dos recámaras, sala, comedor, baño completo y cocina, además, con una pequeña rampa para que pueda entrar con facilidad a su hogar.
A pocos días de recibir su casa, la familia Nolasco Salazar muestra su agradecimiento hacia Unidos por Morelos, ya que en poco tiempo podrán habitar su nueva morada.
“Mi jefecita me decía que era una pérdida de tiempo ir a las reuniones de Unidos por Morelos, de hecho, fuimos de los últimos en anotarnos”, confesó Baltazar.
Recordó que el día del sismo vivió, junto a su madre, una escena como de pesadilla, pues en segundos se derrumbó la casa que habitó por más de 35 años.