Productores de amaranto, semillas, cacahuate y miel, pertenecientes a la zona oriente, señalaron que están a punto de la desesperación porque desde que inició la pandemia por Covid-19 fueron abandonados por todas las dependencias gubernamentales.
Noel Estudillo Castillo detalló que de al menos 500 productores sólo la mitad sigue produciendo para apenas sobrevivir porque, ante las restricciones, ya no tienen qué vender.
Advirtió que de no haber una respuesta, en noviembre y diciembre se instalarán en el Zócalo de Cuernavaca para tratar de vender algo y llevar el sustento a sus familias.
Las dificultades, dijo, comenzaron al inicio de la pandemia y aunque pudieron sobrevivir hasta la fecha, por el hecho de que se han ido alargando las restricciones los productores comenzaron a tener dificultades.
“Dijeron que nuestros productos de cacahuate, amaranto y miel de abeja no eran básicos para la canasta, todos los pequeños talleres cerraron y hoy mucha gente, como pequeños campesinos, vende sus productos en las calles como una forma de sostener a sus familias, pero se les recoge su mercancía”.
El representante de los productores solicitó al gobierno estatal apoyo para la exposición de los productos como una forma de ayuda a las familias que se dedican a la elaboración del amaranto, cacahuate en dulce y sus derivados, y miel de abeja.
Comentó que no cuentan con otra manera de que las familias puedan salir adelante, sino sembrando estos productos, procesándolos y vendiéndolos como dulces artesanales.