A través del Programa Nacional de Reconstrucción (PNR) se destinó para Cuautla alrededor de 10 millones de pesos para la intervención de cinco inmuebles que resultaron dañados por el sismo del 19 de septiembre del 2017.

El director de Obras Públicas de Cuautla, Raúl Aguilar Montiel, informó que para estos trabajos se cuenta con la autorización del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), ya que la mayoría de ellos son considerados Monumentos Históricos.

Se sostuvo una reunión con el delegado y la jefa del departamento de Trámites y Servicios Legales del Centro INAH Morelos, Víctor Hugo Valencia Valera y Alma Rosa Guadalupe Cienfuegos, respectivamente, en donde estuvo presente el alcalde, Jesús Corona Damián, a fin de analizar la autorización y permisos de obra pública en beneficio de la Heroica.

El funcionario municipal recordó que en un inició se solicitó el apoyo para la intervención de seis inmuebles; sin embargo, solo se autorizaron cinco de ellos.

Se trata de las segundas etapas del Palacio Municipal (Casa Real), el museo de la Independencia y el panteón municipal.

Así como se sumaron dos nuevas obras, a las cuales ya se les designó número de expediente y monto de inversión, siendo la Escuela Hermenegildo Galeana (Colegio de Niñas) y la capilla de El Calvario, de Tetelcingo, quedando únicamente fuera la capilla de El Calvario, de la colonia Emiliano Zapata.

En cuanto a los montos, para la Casa Real y el panteón municipal se invertirán dos millones de pesos; para el escuela Hermenegildo Galeana, cuatro millones 800 mil pesos; para la capilla de El Calvario, 850 mil pesos y en el caso del Museo de la Independencia, su obra está a cargo de la Secretaría de Turismo y Cultura.

Finalmente, se podrán intervenir estos sitios después de que sufrieron daños severos tras el sismo del 19 de septiembre del 2017, por lo que en breve se estarán realizando los trabajos de rehabilitación de esos inmuebles considerados como monumentos históricos.

En cuanto a la obra del Palacio municipal, se prevé que tenga una tercera etapa, por lo pronto las instalaciones que fueron rehabilitadas y restauradas en una primera etapa ya podrán ser utilizadas.