Exigen al presidente municipal de Tlaquiltenango, Jorge Maldonado Ortíz exija a los elementos de la policía municipal, devuelvan los 61 mil 500 pesos que se robaron tras un violento operativo de detención de un grupo de trabajadores de campo, a quienes detuvieron allanando una propiedad con abuso de autoridad.
Cerca del mediodía trabajadores del campo se manifestaron en el Ayuntamiento de Tlaquiltenango contra los abusos de autoridad de los elementos de seguridad pública de este municipio, a quienes detuvieron arbitrariamente y le quitaron un morral, donde uno de ellos llevaba el dinero para el pago de los trabajadores, maquinaria y material de cosecha, denunciaron los afectados.
Con pancartas, los afectados acompañados de sus familiares y vecinos de la calle Agricultura de la colonia Gabriel Tepepa de Tlaquiltenango, se manifestaron en demanda de que las autoridades no se conviertan en cómplices de los elementos que no solo los detuvieron arbitrariamente, les robaron en forma descarada, los golpearon y se los llevaron detenidos, por lo que además tuvieron que pagar multas de mil 214 pesos cada uno.
Los hermanos Soto Quintana advirtieron que acudieron a denunciar el robo y los abusos de la autoridad, pero el ministerio público de la fiscalía regional de la zona sur poniente después de hacerlos esperar se negó a levantar la carpeta de investigación, tras recibir una llamada telefónica, evidenciado la complicidad o contubernio en el caso.
Por otra parte, el alcalde Jorge Maldonado Ortiz, les pidió que lo primero que deben hacer es poner la denuncia correspondiente y que él se sujetará al procedimiento legal que arroje la denuncia contra los elementos, situación que indigno a los manifestantes quienes cuestionaron si los estaba protegiendo y su falta de autoridad como presidente municipal de Tlaquiltenango.
El alcalde hizo algunos argumentos legales sobre la presunción de inocencia, pero ningún argumento de los afectados valió la pena para anteponer los derechos de las víctimas a demandar la intervención de la autoridad municipal y la apremiante situación económica para cubrir el pago de la maquinaria y de los trabajadores de la cosecha de jícama.
Abraham Soto Quintana rechazó que los detenidos hubieran golpeado al policía que pretende ahora pasar como víctima, “mi hermano dice que él habló con él policía que dice que fue golpeado y no tenía ni un golpe y hora y media después dijo que fue golpeado, en qué momento si a los detenidos los esposaron tras irrumpir a la propiedad donde estaban reunidos tras la jornada de trabajo”.
Los detenidos fueron golpeados a cachazos sin que pudieran defenderse y mientras los golpeaban los elementos manifestaron que estaban enojados por que habían matado a uno de sus compañeros policías, estuvieron diciendo muchas cosas, como pretendiendo culparlos de la muerte de su compañero, situación de la que son ajenos: “no tenemos nada que ver con eso, somos gente de trabajo, y nos ganamos la vida con el sudor de nuestra frente, no andamos haciendo cosas malas, a nosotros no nos interesa si mataron o no a uno de los elementos” agregaron molestos y exigiendo les devuelvan el dinero.
Señalan directamente como responsable del robo a la persona que estaba al frente de la patrulla 0096, operativo en el que participaron 15 elementos en tres unidades y a quienes les van a dar todos los beneficios y garantías para seguir delinquiendo hasta que concluya un largo proceso, aletargado por la pandemia del Covid-19 y con la protección del alcalde que nuevamente respalda el trabajo de los elementos, aseveraron.