Morelos podría alojar uno de los 10 proyectos más importantes de impulso al desarrollo regional y producción de bienes básicos negociables en el mercado de valores (commodities) del país, de acuerdo con la agencia BNAmericas, especializada en análisis financiero. La mina que Esperanza Silver de México proyecta para Tetlama representa una inversión de 450 millones de dólares, alrededor de 9 mil 500 millones de pesos, distribuidos en 10 años, lo que representa casi un 5 por ciento del producto interno bruto del estado, según cifras del Inegi.
El monto de la inversión, sin embargo, está detenido en medio de conversaciones con autoridades estatales, municipales y con líderes de comunidades a quienes se explican los beneficios sociales del proyecto de minería social y ambientalmente responsable, para conseguir el respaldo que permita el inicio de operaciones de una empresa que generará mil 500 empleos directos y 6 mil indirectos, con los que podría paliarse en más del 50 por ciento la pérdida de empleos que la crisis económica derivada de la pandemia por Covid-19 aunada a otros factores internos han provocado en el estado.
El freno al proyecto minero inició en la administración de Graco Ramírez; el relevo en las administraciones federal, estatal y municipales, permitió retomar la idea ya con modificaciones importantes respecto al primer esbozo. Ahora se trata de un proyecto de minería sustentable, un nuevo modelo de extracción que se alinea con los parámetros trazados en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas. El relevo gubernamental trajo un nuevo impulso a las conversaciones que logró que el proyecto cuente con el aval del gobierno federal, pero aún es necesaria la convergencia de los gobiernos estatal y municipal.
La inversión, sin embargo, según se establece en sus proyecciones financieras, dejaría sólo al municipio de Temixco donde se ubica Tetlama, un ingreso por impuestos y permisos de alrededor de 400 millones de pesos, una cantidad que se acerca a sus ingresos totales, proyectados en poco más de 420 millones cada año.
A cambio de permitir su operación, la empresa además ha ofrecido una serie de ventajas a las comunidades y la intención de un proyecto comunitario a largo plazo que sostenga la economía local. No obstante, pese a los beneficios que se ofrecen a Tetlama, a Temixco, y al estado, al momento ninguna autoridad local se ha pronunciado a favor de la operación del proyecto minero.