"No les voy a fallar", proclamó tres veces Cuauhtémoc Blanco Bravo al protestar por el cargo de gobernador constitucional del estado de Morelos; prometió que defenderá a los morelenses como lo hizo con la camiseta de la selección nacional.
Ante el pleno del Congreso en Plaza de Armas, con la presencia de Olga Sánchez Cordero en representación del presidente de la República electo, Andrés Manuel López Obrador, y el representante presidencial, Eviel Pérez Magaña, confió que abanderará un Gobierno ciudadano para devolver a la entidad la tranquilidad, la justicia y la paz.
Frente a invitados especiales y de los ayuntamientos, tanto en funciones como electos, Blanco Bravo agradeció a su familia y a los morelenses por la confianza de otorgar el más grande honor que ha tenido en toda su vida, ser el gobernador de una entidad prodigiosa como Morelos.
Reiteró su lealtad al presidente de la República electo, Andrés Manuel López Obrador, y dijo entender el dolor que hoy tienen los morelenses por los representantes que fallaron a sus promesas y vendieron con descaro la dignidad de todos los ciudadanos.
Lamentó que aún haya familias que viven en las calles a un año del sismo, la falta de medicinas en el sector salud, la inseguridad para muchos morelenses: feminicidios, secuestrados y desaparecidos y mujeres asesinadas.
Eso va a cambiar, hay mucho trabajo que realizar, cuentas claras y justicia que hacer valer; como sociedad nunca debimos acostumbrarnos a la violencia ni a la corrupción, vamos a quitarlas del camino para avanzar. No será sencillo, pero sí necesario, les aseguro que valdrá la pena, es momento de tomar el rumbo correcto
Blanco Bravo insistió que recibe una administración saqueada y un estado abandonado, pero que también recibimos de Morelos un infinito potencial con gente buena lista para ser anfitrión del mundo.
Prometió que desde este momento se enfocará hacia adelante para que su administración ciudadana atienda lo más urgente, para alcanzar la meta de devolver a esta tierra la garantía de salir a las calles sin miedo.
Junto a los invitados como diputados federales, senadores y ex futbolistas, el gobernador de la entidad, confesó que en su vida personal ha logrado infinidad de logros, pero estar al frente de la administración estatal es el honor más grande que alcanza; "se los dije antes y se los digo ahora, no voy a fallar", aseguró.