Por iniciativa de los ejidatarios de Yecapixtla se lleva a cabo la construcción de una capilla en honor a San Isidro Labrador, el santo patrono de los agricultores, en un área de nueve hectáreas que acaba de ser reforestada con 3 mil árboles.
Dicha capilla tendrá una construcción de 40 metros cuadrados, en la cual ya se colocaron los cimientos y primeros castillos, dio a conocer el comisariado ejidal de Yecapixtla, Pedro Sánchez Alvear, al precisar que el recinto religioso será costeado con la cooperación de los ejidatarios y de la gente que desee aportar.
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El líder campesino dijo que el proyecto surgió después de la ceremonia eucarística que se realizó en estos campos el pasado 15 de mayo en el día de San Isidro Labrador.
“Nos reunimos compañeros del ejido y demás gente para ponernos de acuerdo en esta construcción, la cual se lleva a cabo en una extensión que ya emparejamos de 2 mil metros cuadrados y de los cuales 40 serán de construcción”.
Explicó que la edificación será en el mismo lugar donde se celebró la ceremonia hace cuatro meses en el arranque del actual temporal de lluvias, con la asistencia del sacerdote del pueblo y de cientos de personas que en procesión caminaron con la imagen de San Isidro Labrador al frente en un tractor.
En aquella ocasión los feligreses salieron de la iglesia de San Juan Bautista, ubicada en el centro de Yecapixtla, hasta ese punto donde es levantada la capilla, aproximadamente a una distancia de 2 kilómetros de campo adentro.
El agricultor explicó que hasta el momento se ha avanzado en el emparejamiento del terreno, la colocación de cimientos y los primeros castillos.
“Este es el resultado de las primeras cooperaciones de la gente, por lo que esperamos que la población y, sobre todo los ejidatarios, sigamos aportando para avanzar en la construcción, la cual por lo mismo no tiene todavía fecha de culminación ni tampoco cuánto será el costo total de la misma”.
Yecapixtla: La fe los mueve
En aquella ocasión, justo por la noche después de la ceremonia cayó un fuerte aguacero que ellos lo vieron como una bendición que les ha traído un buen temporal.
“Nuestra fe nos mueve y por eso estamos llevando a cabo este proyecto para tener ahí, en nuestro campo, la imagen de nuestro santo patrono, justamente en esa área que ha sido reforestada con 3 mil árboles endémicos y con otros mil agaves que nos donaron mediante el programa Sembrando Vidas, además de que nosotros también aportamos otros 50 árboles que colocamos justamente alrededor de este terreno donde estará la capilla”.