Esta vez no fue igual: para entrar a las aulas, los jóvenes tuvieron que pasar por varios filtros en los que se les tomó la temperatura, se les aplicó gel antibacterial y se les pidió recordar las medidas de prevención ante el Covid-19. Sus familiares, esta vez, se quedaron afuera. Hacia dentro, el camino estaba marcado con una cinta perimetral amarilla con la palabra precaución impresa una y otra vez.
Así fue el ingreso de quienes este sábado acudieron a las sedes de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) en el municipio de Cuautla con la ilusión de ingresar a la matrícula de estudiantes de la máxima casa de estudios de la entidad. Afortunadamente, ninguno de ellos presentó síntomas sospechosos y todos ingresaron satisfactoriamente. El resto dependerá de su desempeño en la prueba.
“Todos los chicos vienen bien, traen la temperatura normal; los nervios a veces les levantan la temperatura, pero todos vienen bien y no hubo necesidad de regresar a ni uno”, refirió Adrián Noriega Granados, Secretario de Extensión de la Preparatoria 3, una de las dos sedes en las que se aplicó el examen. La otra, a un lado, fue la Facultad de Estudios Superiores de Cuautla (FESC).
En el operativo que se implementó este sábado para garantizar la seguridad sanitaria en la aplicación del examen participó no sólo personal de la UAEM, sino también de la Dirección de Salud del Ayuntamiento de Cuautla, la Dirección de Tránsito y la Dirección de Protección Civil.
“La universidad nos instruyó para que pusiéramos nuestro filtro sanitario, tenemos los tapetes sanitizantes; las chicas de servicio social que están tomando la temperatura, aplicando gel, y la sana distancia: en cada uno de los salones se separaron las butacas para la aplicación del examen”, relató Noriega, posicionado en el filtro de acceso a las instalaciones de la preparatoria.
Este año, el examen de admisión de la UAEM se realiza durante dos días en dos horarios distintos: este sábado y domingo en horarios de las 8:00 a las 12:30 horas y de las 15:00 a las 19:30 horas, una estrategia que permite la reducción de grupos y un mayor control de las medidas preventivas ante el Covid-19.
“Terminando el examen se sanitizan los salones, se vuelven a limpiar y se ponen nuevamente los filtros”, explicó Noriega.