Dado que los panteones permanecieron cerrados este 10 de Mayo, familiares optaron por colocar pequeños altares improvisados en sus casas para recordar a su madre, suegra, hermana, tía o sobrina fallecida.
“Si no le pongo veladoras y flores es como si me olvidara de ella, siempre lo hago pero ésta vez no pude ir a dejárselas a su tumba”, platica Mayda mientras enciende las veladoras color rojas en una pequeña mesita al interior de su casa.
En su humilde hogar coloca un ramo de flores, cuatro veladoras rojas y arriba la imagen de la “Virgen de Guadalupe” quien “también fue madre”, relata.
Mayda se levantó muy temprano para lavar su ropa y llegar justo en el momento en que abrieron la tienda para compras las veladoras “y fue por un ramo de flores amarillas en el lugar en el que cada año venden en mi colonia”.
Casi para oscurecer apaga las veladoras para evitar que éstas provoquen un incendio “ya para esa hora ya se terminó la cera, es como si mamá quisiera luz en su camino”.