Centros culturales, aún en el aislamiento

Los miembros del sector artístico han recurrido a empleos temporales o alternativas en línea para subsistir

Emmanuel Ruiz | El Sol de Cuautla

  · lunes 15 de junio de 2020

Los Centros Culturales esperarás las indicaciones de las autoridades para reabrir sus puertas al público/Centro Cultural El Callejón

Mientras que muchos negocios de Cuautla han reabierto ya sus puertas y otros lo harán a partir de este 15 de junio, los centros culturales de la localidad seguirán esperando que el escenario de salud del Covid-19, en cuyo semáforo Morelos todavía se encuentra en fase roja, mejore.

De acuerdo con Mariana Barreda, del Centro Cultural “El Callejón”, un espacio en el que se realizan distintas actividades que van desde la fabricación de alebrijes hasta salas de lectura, y que una vez al mes también solía participar en el trueque de libros que se instalaba en la antigua estación del ferrocarril interoceánico, dichos espacios todavía no han recibido una instrucción por parte de las autoridades para retomar actividades como parte de la llamada “nueva normalidad”.

“De momento no nos hemos reunido para determinar si vamos a reabrir o no”, señala Mariana, antropóloga que, además de participar en foros culturales, también se dedica a la pintura de sombreros y las artesanías en cartón.

Durante la contingencia sanitaria, artistas y promotores culturales morelenses señalaron la falta de apoyo por parte de las autoridades para hacer frente a la crisis económica que afectó su vida a nivel personal y profesional. En algunos casos, los artistas se organizaron para poner en marcha iniciativas que buscaron reactivar su economía mediante el intercambio de sus productos y servicios por productos de la canasta básica, algo que fue posible a través de un trueque que se puso en marcha a través de las redes sociales.

En otros casos, hubo músicos que, a falta de contrataciones y espacios para presentarse, decidieron poner en marcha negocios alternativos de manera temporal. En Yautepec, la familia Rubio Zavala, promotora del corrido suriano, abrió un negocio de preparación de alimentos para hacer frente a la crisis.

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