Los caminos de saca que se encuentran destruidos por las lluvias y el constante paso de vehículos pesados en el ejido de Gabriel Tepepa, deberán esperar a que pase el temporal para su recuperación, debido a que es imposible arreglarlos en estos momentos porque el suelo es barro y no se puede trabajar en esas condiciones.

Así lo dio a conocer el comisariado ejidal Alberto Kaleb Olivar, al informar que en esta labor apoyarán tanto el Ingenio de Casasano como las uniones cañeras con maquinaria ymaterial para poder arreglar todos estos caminos que por ahora son prácticamente intransitables.

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Dio a conocer que en este ejido prácticamente el 85 por ciento de la tierra cultivable de temporal son cañaverales, de ahí que el ingenio y las uniones están comprometidas a apoyar después de que por el tránsito de los pesados camiones de carga los caminos se encuentran en malas condiciones.

“Las lluvias han estado muy intensas, si bien benefician nuestros sembradíos, nos han pasado a perjudicar en todos nuestras caminos de los campos, los cuales están en muy malas condiciones”.

No obstante, informó que no es viable en estos momentos hacer trabajos de reparación, porque lejos de tener un beneficio se puede perjudicar todavía más, con la mezcla de materiales y el barro.

“Se pide apoyo para estos trabajos al ingenio de Casasano y las asociaciones, como las uniones cañeras, para arreglarlos; sin embargo, esto se hará hasta que acaben las lluvias, por ahora no se podrá hacer más que alguno que otro trabajos temporal en lo más dañado, pero, repito, se va a empezar a trabajar hasta que terminen las lluvias, que según se pronostica será hasta el mes de noviembre”.

Reconoció que una de las zonas más dañadas en su ejido es la calle del Campesino, donde los vecinos durante el presente temporal por querer componer la calle eliminaron un bordo, dejando inservibles esa parte que es donde se están atascando los vehículos que pasan por el lugar.

Recomendó no hacer acciones en estos momentos y esperar a que cesen las lluvias para poder meter la maquinaria y volver a aplanar estos caminos.