Lejos de presumir algún avance en el acondicionamiento de calles y otras estructuras públicas para las personas que se transportan en silla de ruedas, José Manuel Saldaña Andreu, de la Asociación para el Desarrollo Productivo A.C., lamentó que el año comience en peores condiciones de las que inició 2023, con calles que representan un verdadero peligro para las personas con discapacidad no solo en Cuautla, sino en el resto de municipios del estado.
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"Salir en silla de ruedas es muy peligroso. Hay algunas rampas bien hechas, pero muchas calles están terribles. Hay coladeras rotas que pueden causar un accidente", dijo el activista, quien vive su día en día en silla de ruedas.
Saldaña Andreu reconoció la intención que han tenido municipios como Ayala y Jantetelco en mejorar las condiciones de sus vialidades, incluso organizando eventos destinados a la convivencia de las personas con discapacidad, aunque consideró que estas actividades no cumplen con las necesidades de este sector de la población, que sufre el tránsito en las vialidades y la falta de empleos dignos.
"Tenemos que ir sobre las calles, porque las banquetas no son las adecuadas para nosotros", dijo.
En varias ocasiones, José Manuel Saldaña Andreu ha denunciado la falta de interés de las autoridades por contribuir a la mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad, pero, en su opinión, la situación no ha hecho sino empeorar año con año. Para quienes se mueven en silla de ruedas, dijo, Cuernavaca también es un calvario:
"Es todavía más complicado, porque no puedes andar en la calle en la silla, excepto en la avenida Plan de Ayala, porque todo es de subida o bajada y es peligroso", dijo.
Esta situación ha provocado que cada vez menos personas con discapacidad se animen a salir a las calles y que prefieran permanecer en sus casas para evitar un posible accidente.