Salud animal en Cuautla: Jornadas de control contra las garrapatas

El equipo de zoonosis visita las colonias para ofrecer atención veterinaria a los animales en situación de calle

Emmanuel Ruiz / El Sol de Cuautla

  · domingo 20 de octubre de 2024

El problema de las garrapatas se agrava debido a la proliferación de perros callejeros en la ciudad. /Emmanuel Ruiz /El Sol de Cuautla

La Coordinación de Zoonosis de Cuautla, dirigida por Ismael Domínguez, ha iniciado jornadas de control animal en diversas colonias del municipio con el propósito de prevenir brotes de enfermedades transmitidas por garrapatas. Estas jornadas incluyen esterilización y desparasitación gratuita de perros y gatos, contribuyendo a disminuir los riesgos de zoonosis entre la población.

Prevención de Rickettsiosis

“Nuestro principal objetivo es evitar nuevos brotes de rickettsiosis, una enfermedad grave transmitida por garrapatas que ya nos afectó en el pasado”, explicó Domínguez, refiriéndose al brote de 2017 en la colonia Iztaccíhuatl, que llevó a establecer un cerco sanitario.

“Esa enfermedad es mortal para los humanos, así que no podemos bajar la guardia”, añadió el funcionario.

Un grupo de perros se asoman desde una azotea. Un 70% de animales de compañía en México vive en la calle. / Foto cortesía | Pexels

Atención veterinaria gratuita

Durante las jornadas, el equipo de zoonosis visita las colonias para ofrecer atención veterinaria a los animales en situación de calle y a aquellos bajo el cuidado de familias que no pueden costear servicios de salud animal.

“Además de la esterilización, aplicamos tratamientos contra parásitos externos, como garrapatas”, afirmó Domínguez, subrayando la importancia de la participación vecinal al llevar a sus mascotas.

Proliferación de perros callejeros

El especialista destacó que el problema de las garrapatas se agrava por la proliferación de perros callejeros en ciertas zonas de la ciudad.

El municipio ha recibido reportes de colonos donde manadas de perros se han convertido en un problema, no solo por posibles agresiones, sino también por los desechos que dejan en áreas públicas, lo que aumenta el riesgo de parasitosis.