Este jueves, diputados locales aprobaron la revocación de 12 jubilaciones, de diversos exservidores públicos, luego de más de seis horas de espera para reanudar la sesión, tras un receso, misma que fue convocada a las 10:00 horas de ayer, y la cual no se podía concretar ante la falta de quórum legal.
Lo anterior sería para cumplir la Comisión del Trabajo, Previsión y Seguridad Social con la investigación que exigió el pleno del Congreso el pasado 12 de octubre, con el objetivo de determinar la forma y los procesos de cómo algunos ciudadanos se hicieron de pensiones indebidas durante la LIII Legislatura.
Con lo anterior, se demuestra que los diputados persisten en revocar las jubilaciones doradas, aunque en su primer intento, en abril, varios de los beneficiarios han obtenido la suspensión definitiva y provisional de los juzgados federales para evitar sean eliminados los decretos.
Entre las jubilaciones de la orden del día se encontraban:
Juan Bobadilla Cuenca, quien en su último cargo se desempeñó como auxiliar adscrito al exdiputado perredista Julio Espín Navarrete; Miguel Arellano Rivera, expolicía Custodio Primero, adscrito a la Dirección General de Establecimientos Penitenciarios de la Secretaría de Gobierno; Rocío Flores Reynoso, quien se desempeñó como Cajera, adscrita a la Subprocuraduría Zona Surponiente de la Fiscalía General del Estado.
Además de Helena Marín Sánchez, esposa del exdiputado local perredista José Manuel Tablas Pimentel y quien fungió como secretaria técnica de la Comisión de Fortalecimiento Municipal, la cual presidía su esposo, entre otros funcionarios de la administración pasada, quienes se desempeñaron en diversos puestos de los ayuntamientos e incluso del Congreso local.
