Durante el recorrido que realizó este domingo en el estado de Morelos, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo Aburto, visitó la clínica San Diego, en el municipio de Cuautla, lugar donde actualmente trabaja el personal del instituto en el marco de la apertura que realizó el gobierno federal con instituciones médicas privadas: después del sismo del 19-S, que dañó severamente la clínica 07, el personal había trabajado más de dos años en el Hospital General de Cuautla, en un pequeño espacio con condiciones de hacinamiento.
En esta visita, en la que estuvo acompañado por el delegado del IMSS en Morelos, Francisco Monsebaiz Salinas, el director general del instituto estimó que el próximo miércoles el personal se trasladará a la torre de hospitalización de la clínica particular, donde dispondrán de 18 camas más, así como un área de recuperación y una “suite”, además de una unidad médica móvil que también coadyuvará en el servicio regional de salud:
Aquí están muy apretados y no es la forma como debemos de atender, entendemos que fue una solución de emergencia, de urgencia, pero se puede solucionar, expresó el funcionario federal.
Robledo Aburto detalló que la unidad móvil, procedente de Guerrero y equipada con consultorio y lavamanos, llegaría este lunes.
Durante las últimas semanas, particularmente después de iniciara la contingencia sanitaria causada por la Covid-19, trabajadores de la clínica 07 del IMSS, cuyo edificio principal todavía se encuentra en proceso de reconstrucción por los daños del sismo, se manifestaron en varias ocasiones para exigir a las autoridades concluir con dichos trabajos, hartos de prestar servicio a la población en condiciones de hacinamiento.