En la comunidad de Tetelcingo, a pesar de la contingencia, este año como desde hace 200 años, se llevó a cabo la fiesta de la cosecha, la cual permite agradecer a la madre tierra los favores recibidos durante el temporal y haber obtenido buenas cosechas.
Debido a la contingencia, en la celebración unicamente estuvieron presentes los mayordomos.
Debido a la pandemia, los habitantes de la comunidad señalaron que se tuvo que cambiar algunas de las actividades que tradicionalmente se llevaban a cabo, ya que esta es una fiesta en donde acuden cientos de personas; sin embargo, en esta ocasión fue limitado el acceso, además de que no se hizo en las calles como se hacía de manera normal hasta el año pasado.
Cabe resaltar que para esta celebración las principales calles se adornan con papel picado y arcos en las principales entradas a la comunidad, ya que se realiza una procesión, en donde cuelgan productos del campo como naranjas, calabazas, chayotes y elotes.
Además que para completar esta festividad, diversos grupos organizados por sus mayordomías danzan para agradecer la bendición de haber tenido una buena cosecha.
Los habitantes resaltaron que esta tradición ha permanecido durante más de 200 años entre los habitantes de esa comunidad indígena.