El presidente municipal electo de Jiutepec, Rafael Reyes, confió que hay resistencia por parte del Gobierno saliente para entregar información y comenzar con el proceso de entrega recepción; comentó ante integrantes del Colegio de Ingenieros que no habrá impunidad una vez que tome control; "quien la deba la tendrá que pagar", advirtió. Además, alertó que serán al menos 800 empleados despedidos, aunque prevalece la incertidumbre sobre la situación real del municipio en todas su áreas.
Reyes afirmó que la exigencia de los ciudadanos es que se conozca qué pasó en el Ayuntamiento, aunque ha considerado que es necesario dar vuelta a la página el 1 de julio; "tenemos que buscar un espacio de reconciliación entre la gente y a partir de ahí comenzar a construir el proyecto sobre lo que la gente quiere" agregó.
Asimismo, lamentó que el alcalde que buscaba una reelección, hoy en venganza, esté dando un coscorrón a los ciudadanos, lo cual es sin duda una irresponsabilidad, pues a pesar de que han solicitado a la administración perredista a que comience el proceso de la entrega de recepción a la fecha, no hay una respuesta, lo que da evidencia de la resistencia a trabajar y conocer el estado que guarda el Gobierno municipal; "no hay cacería de brujas, pero siempre con la transparencia y la rendición de cuentas", precisó.
Denotó que el proceso de despidos se hace de manera amañada, porque el objetivo no es despedir 300 sino 850 personas, por lo que llamó a los despedidos a acudir a la Fiscalía Especializada para la atención de Delitos Electorales (Fepade), a denunciar que eran obligados a llevar votos a favor de alguien.
Además, destacó que entre los grandes problemas que enfrenta Jiutepec, la inseguridad, la falta de empleo, la salud pública, deserción escolar, una alta tasa de pobreza y una administración de gasto exagerado.
Sin embargo, dijo que una vez que comience el proceso de entrega recepción pedirán participar en la elaboración del paquete presupuestal del próximo año, con el fin de conocer a fondo la planeación del gasto del año siguiente.
También expresó a los ingenieros que todo lo que esté a su alcance permitirá que se involucren en la obra pública, aunque dudó que haya posibilidades dado el gasto exagerado del actual Gobierno, pero prometió que hará una reingeniería del Ayuntamiento.
Exigió transparencia en lo que pasó en Jiutepec,y advirtió que habrá mano dura para sancionar si hubo abusos.
El que la hizo la tiene que pagar
