A pesar del buen temporal que se registró este año, los productores de arroz del ejido de Cuautla enfrentan la incertidumbre sobre la regulación de precios, que será decisiva para definir sus ganancias de este ciclo agrícola, según expuso Carlos Domínguez, productor de arroz del ejido de Cuautla, quien explicó que, anque el rendimiento en los cultivos fue superior al de otros años, el precio sigue siendo el principal reto.
Domínguez detalló que este año sus parcelas alcanzaron un rendimiento de más de mil 100 kilogramos por hectárea, es decir, entre 11 y 12 toneladas por hectárea:
"Para mí fue un año bueno en arroz, la mera verdad. Estamos esperando que regulen el precio para ver cómo nos fue realmente en las ganancias, pero yo digo que va a estar bien", dijo, confiando en que los buenos resultados en los cultivos serán suficientes para obtener un margen favorable.
No obstante, el precio del arroz, que depende de la regulación de Segalmex (Seguridad Alimentaria Mexicana), aún no se ha definido. De acuerdo con Domínguez, en 2023 el ajuste en el precio del arroz apenas cubrió los gastos de producción:
Esperamos que se regule el precio del arroz, porque hace un años salimos justos en gastos, pero siempre con la esperanza de que haya para el siguiente año
Este año, los productores esperan un apoyo de dos mil 770 pesos por tonelada, pero el retraso en la entrega de estos recursos ha generado inquietud. A pesar de la tardanza, los arroceros mantienen la esperanza de que el apoyo les permita continuar sembrando el próximo año.