Entre las fechas que más esperan los vendedores ambulantes de Cuautla está, sin duda, el 2 de mayo, ya que es este día cuando se realiza el desfile cívico militar que conmemora el Rompimiento del Sitio de 1812, y que atrae a cientos de familias a lo largo de la avenida Reforma, que es recorrido por los contingentes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Marina, la Guardia Nacional y las escuelas invitadas.

“Esperemos que sea un buen día para nosotros y para la gente”, dice Christian, un joven cuautlense que se dedica a preparar y vender raspados y chicharrones en la zona norte de la ciudad.

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Christian lleva dedicándose a la venta de raspados desde que era un niño. Ha encontrado en este trabajo una forma honrada de ganarse la vida, aunque las cosas no son tan simples como suenan:

“Desde chavo, desde niño he trabajado. También tengo otro trabajo, y así me la he llevado, porque hay que buscarle”, dice el comerciante mientras prepara un raspado de limón. También tiene de guayaba, vainilla y tamarindo.

Más que nada, hay que atender bien a la gente, amablemente, y darles lo que piden para que tengan el gusto de comprar otra vez

El tiempo que duró el desfile, de las 10:00 a las 12:00 horas, aproximadamente, los vendedores se desplegaron en una de las avenidas principales del municipio, que la atraviesa de norte a sur.

Desde churros hasta chicharrones, además de tacos de arroz y aguas frescas, fue uno de los días en que más ventas han tenido los comerciantes. De hecho, los propietarios de algunos de los locales ubicados en la avenida aprovecharon para preparar alimentos y bebidas y exhibirlas sobre la banqueta.

“Es que hoy mucha gente baja al centro, así que hay que aprovechar”, dijo otra comerciante, que aprovechó para vender tortas y ofrecer el sanitario de su local como baño público, con un costo de cinco pesos.