Las plagas han causado importantes estragos en los cultivos del municipio de Atlatlahucan. Pedro Ramírez López, comisariado ejidal señala que los campesinos cada vez enfrentan más problemas para poder sembrar.
En el ejido se siembran calabacitas, chile morrón, jitomate, pepino, e incluso algunos campesinos cultivan sandía, por lo que el lugar se consolida como un importante productos, tanto de la región oriente como para la Ciudad de México, ya que muchos de esos alimentos abastecen a las familias del centro del país.
Sin embargo, las plagas son un problema para la productores, pues además de que por ellas se tienen que hacer inversiones mucho más fuertes en las tierras, algunos han perdido sus cultivos.
Actualmente, en el ejido se pueden observar varios cultivos secos, principalmente de jitomates y pepinos.
Ramírez López señaló que esto se debe a las plagas y a la sequía, pues este es un ejido que se enfrenta a la falta de agua de manera permanente.
Señaló que aún no saben con exactitud cuánto es la pérdida que enfrentan los ejidatarios, pues apenas están terminando el ciclo productivo por lo que en breve comenzarán a contabilizar cuántas hectáreas se perdieron por completo y cuánto representa eso económicamente.
“Las plagas y las acciones climatológicas nos pegan muy fuerte, para salvarnos de las plagas tenemos que invertir mucho más dinero para salvar nuestros cultivos y la verdad es que muchas veces apenas y alcanzamos a recuperar la inversión. De la situación climatológica no podemos controlarlo y es cuando intervienen los seguros pero para obtenerlos es un proceso muy complicado”.
Son 86 hectáreas las que trabajan con la siembra de estos alimentos.