Más de 17 mil paquetes de alimento al mes entrega el Banco de Alimentos en Morelos, luego de que en los últimos meses incrementara la demanda de solicitud para ser beneficiario hasta 500 por ciento, de acuerdo con Everardo Riestra Ochoa, director operativo del centro.
Destacó que en febrero inició operaciones el centro de distribución en Temixco, donde se pretende apoyar a más de mil 500 personas de la región.
Asimismo, confirmó que en lo que va del año incrementó la solicitud de nuevos beneficiarios; sin embargo, no en comparación a cuando inició la pandemia. Señalan que este año la demanda creció hasta 500 por ciento.
Pero el reto que enfrenta el Banco de Alimentos es ver las estrategias a implementar para sostener a tantas familias; “principalmente porque somos un estado que no produce alimentos en grandes cantidades, generalmente son espacios pequeños, invernaderos pequeños, complica el poder acopiar la cantidad suficiente para atender a todas las personas, además de que debe de ser un paquete balanceado. Aquí en el estado los productos son generalmente jitomate, pepino, cebolla, y lo que tenemos que hacer es buscar en otras partes del estado, ahorita estamos trayendo naranja, toronja por el tema de la vitamina C, desde Veracruz”.
El tema de la pandemia ha pegado a todos los sectores, y por esta razón se ha reducido el número de aliados y las donaciones. "Algunas empresas redujeron número de colaboradores, otros disminuyeron sus ventas y ya no pueden seguir apoyando".
Debido a lo anterior, han buscado aliados afuera del estado, consiguiendo alimentos en otras entidades, principalmente frutas y verduras, mientras que con algunos proveedores están comprando gran parte de alimento, para poder balancear los paquetes.
Recordó que con las cuotas de recuperación que pagan los beneficiarios se adquieren más alimentos, poder pagar los traslados, y agrego que además deben de conseguir otra cantidad de dinero y alimentos, porque las cuotas no cubren todos los gastos.
La cuota de recuperación desde hace dos años se ha mantenido, no ha incrementado, los beneficiarios pagan 100 pesos, el costo real del paquete alimentario que se llevan tiene un costo real tres veces más de lo que aportan.
Riestra Ochoa indicó que esta es una situación complicada que se atraviesa, consideró que entre todos deberían ayudarse, muchas personas que están pasándola mal, que se quedaron sin empleo, o les recortaron sus salarios y no tienen para comer, quizá un familiar, un amigo, un vecino puede ayudarles.
“Me he dado cuenta de que las personas que se acercan con nosotros no solamente son las personas que estaban en situación de vulnerabilidad antes de la pandemia, han llegado muchas personas que son profesionistas que se quedaron sin trabajo y no tiene la posibilidad de llevar alimento a su casa y piden ayuda”, resaltó.