Este jueves se dio a conocer que Luis Rubiales renunciará el próximo viernes 25 de agosto a su puesto como presidente de la Federación Española de Fútbol tras besar sin consentimiento a la jugadora Jenni Hermoso durante la final de Mundial de futbol en Australia y Nueva Zelanda.
Rubiales accedió al cargo en mayo de 2018, pero dimitirá de dicho cargo tras la presión política, social y del mundo del deporte que ha recibido por su comportamiento tras la conquista del Mundial por la selección española, informaron a EFE fuentes federativas.
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Esto se da luego de que la FIFA anunció la apertura de un procedimiento disciplinario contra el presidente de la Federación Española de Fútbol por haber dado un beso forzado en la boca a la jugadora Jenni Hermoso.
La FIFA había guardado silencio hasta el momento, tras tres días de críticas, entre ellas las del presidente español Pedro Sánchez, la Liga Profesional de Fútbol o el sindicato internacional de jugadores FIFPro.
Pero este jueves se pronunció: "Estos hechos podrían resultar constitutivos de violaciones de los artículos 13.1 y 13.2 del Código Disciplinario de la FIFA".
Asimismo, Jenni Hermoso pidió que se tomaran "medidas ejemplares" contra el presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, y dijo que confiaba en su sindicato para resolver el problema.
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"Mi sindicato FUTPRO, en coordinación con mi agencia TMJ, se están encargando de defender mis intereses y ser los interlocutores sobre este asunto", dijo Hermoso en un comunicado conjunto difundido por el sindicato y su agencia.